Los abajo firmantes, vecinos de la ciudad de Mercedes, reclamamos públicamente que las empresas de telefonía móvil cesen en sus intentos clandestinos de instalar mástiles en nuestra ciudad, y respeten nuestra legislación y nuestra voluntad.
Reclamamos un compromiso público que termine con esta agresión sistemática a nuestros hogares.
La instalación de antenas de este tipo están prohibidas por ordenanza. Además, vecinos de diferentes barriadas manifestamos reiteradamente nuestra oposición a la presencia de más antenas, y reclamamos una medición del nivel actual de radiaciones como paso inicial para definir una planificación al respecto.
Queremos que se respete nuestro derecho como comunidad a decidir sobre el nivel de contaminación electromagnética que estamos dispuestos a soportar.
Cada mástil de telefonía móvil no sólo incrementa los riesgos sanitarios en un área crítica de 500 metros a la redonda, sino que además afecta a toda la ciudad agregando un nuevo foco de contaminación.
Incuestionables documentos científicos demuestran que la proliferación de radiaciones tiene influencias negativas sobre la salud:
- · La declaración de Friburgo en 2002 reunió a decenas de médicos alemanes que vincularon la proliferación de insomnio, jaquecas, depresión y una larga lista de trastornos con la presencia de antenas de microondas en ciertas áreas y edificios.
- · The Bioinitiative Report, años después, firmado por 14 científicos de varios países, dictaminó lo mismo, agregando pruebas de laboratorio y extendiendo la lista con enfermedades más graves.
- · El biólogo alemán Warnke en su libro “Abejas, aves y hombres” (2009) explica detalladamente cómo la contaminación electromagnética está afectando en forma devastadora a la naturaleza y a los seres vivos.
- · Los suecos Örjan Hallberg y Olle Johansson mostraron en un estudio de 2002 la correlación entre el incremento de las emisiones de radio y el incremento de una larga lista de tumores malignos.
- · Y la lista sigue.
Por lo tanto, reclamamos a las autoridades locales que apliquen todo el rigor de la ley ante las violaciones a las normas, y detengan de inmediato el nuevo mástil en construcción en calle 30 bis entre 5 y 7, así como cualquier nuevo intento en el futuro que afecte a otras áreas.