Por Organización Negro Olmedo
Cuando hace ya unos meses comenzamos a trabajar en la creación del Encuentro Nacional de Actores, queríamos ayudar a construir una herramienta de política cultural qjue sirviera para la discusión, la reflexión y la acción en este terreno. Sosteníamos entonces, que la realidad de los últimos años había planteado nuevos problemas, había creado situaciones inéditas (por ejemplo la sanción de la Ley de Medios), y que, en resumen, las leyes referidas a la actividad del sector, y los organismos en él actuantes, habían quedado un poco atrasados para poder cumplir con sus funciones.
Asistíamos entonces a una paradojal situación: en el país se abría un replanteo en casi todos los niveles y áreas. La política volvía a ocupar su rol como instrumento del pueblo. Y paralelamente en el sector se carecía de espacios para la discusión y análisis colectivo de las cuestiones más profundas.
Por ese motivo, un grupo de compañeros actores, comenzó a reunirse en Fray Mocho. Las discusiones llevaron en ese momento a la presentación circunstancial del Encuentro Nacional de Actores en las elecciones de nuestro sindicato, la Asociación Argentina de Actores, pero lo más importante seguía siendo el auscultamiento de la realidad y la discusión fraternal acerca de la problemática.
Fueron dándose así las reuniones en Salta, Tucumán, Córdoba, Mendoza, La Plata (en dos oportunidades), Mar del Plata, Mercedes, Rosario y dentro mismo de Capital Federal.
Tras esos encuentros, ahora podemos decirlo con más certeza: los problemas existen y hay muchos compañeros que sienten la necesidad de trabajar por las soluciones. Todos ellos quieren incidir y decidir sobre lo que les afecta.
Siempre repetimos que «el Encuentro somos todos…». Hemos creado una instancia horizontal en donde todos los actores y teatristas, los independientes, los profesionales, los de las provincias y de la Capital, debaten y plantean sus ideas, sin premisas ni condicionamientos. La realidad de nuestra profesión ha mejorado, pero presenta todavía, aspectos negativos que deben solucionarse.
Es por eso, compañeros, que los invitamos a todos a integrarse a ese debate en el Encuentro Nacional de Actores. A dar juntos los pasos que aún faltan ,-que serán muchos y largo el tiempo necesario-, pero si nosotros también somos muchos, y debatimos, y actuamos bien, la realidad del teatro argentino seguramente habrá de mejorar.