Desde el área municipal dan a conocer la versión de los hechos en relación a la polémica desatada esta semana a partir de conocerse el resultado de la auditoria que realizó el Estado Nacional sobre el Plan Federal de Viviendas y las obras en el Favaloro.
Gustavo Salomone, uno de los responsanles locales, dio su versión del los acontecimientos desde el magazine de prensa, donde se expresa lo siguiente:
En algunos medios se dio a conocer un informe técnico del Ministerio de Planificación de Nación, donde se hacía referencia a los alcances y la actualidad del plan que se inició en el Acceso Manuel Sanmartín y que debido a diferentes complicaciones todavía está en ejecución.
Si bien se planteó en algunos medios de la ciudad, que el informe habría sido negativo para la actual administración comunal, desde el municipio sostienen que en ningún momento se menciona en el informe del ministerio que hubo fallas en los controles del estado municipal. “No es más que una burda operación periodística y política de los dos semanarios, algo a lo que ya estamos acostumbrados”, sentenció el ingeniero Gustavo Salomone, secretario de Obras Públicas.“Son títulos maliciosos que tiran por la borda las gestiones que se están llevando adelante en el Ministerio para la readecuación de los precios de las casas”, agregó.
Uno de los temas en el tapete tenía que ver con el supuesto cobro de parte de las empresas de mayor dinero del debido, en relación con el avance de obra que habían hecho. “En lo que se refiere a las sobrecertificaciones hay que decir que el plan federal contempló en todo el país para las empresas un anticipo del 15 por ciento antes de comenzar la obra. Entonces siempre llevaban más cobrado de lo que iban haciendo, es lógica pura. Por ejemplo, avanzaban 15 por ciento la obra y se les pagaba por eso, pero ya tenían 15 por ciento más que habían cobrado de anticipo, con lo cual llevaban 30 por ciento cobrado, pero sólo un 15 de obra”, dijo el funcionario.
Salomone también dejó en claro su postura y reiteró una prédica de parte del gobierno comunal con respecto a esta cuestión. “Los certificados de obra no eran decisión del municipio nada más. Había una inspectora externa y además estaba el Instituto de la Vivienda de la provincia de Buenos Aires que era el que también controlaba y enviaba las certificaciones a Nación para que envíen los pagos. Volvemos a decir algo hasta el cansancio, la clave de que las casas aún no estén terminadas se debea los atrasos de los pagos (el primer certificado tardó seis meses en abonarse y el segundo tres más) y además la falta de readecuación de los preciosque hicieron insostenible el cumplimiento de las empresas”, dijo Salomone.
Pero ya sobre el final, el funcionario municipal volvió a la carga para sostener que todo se trata de una manipulación antojadiza del informe del ministerio por parte de algunos medios. “El informe de la auditoría habla claramente en cuestiones técnicas y en ninguna parte dice que hubo fallas en los controles por parte del municipio. Eso que sale en los semanarios ellos lo atribuyen a fuentes cercanas al ministerio, pero da la casualidad que en los dos medios dice lo mismo como si se hubiesen puesto de acuerdo. El informe técnico lo único que cuestiona, o mejor dicho plantea como en desacuerdo, es la continuidad de la obra en forma mixta como lo venimos haciendo con intervención del municipio para terminar las casas”.
Hoy el municipio trabaja en la concreción de un núcleo de 15 casas para terminar en breve tiempo y para tal fin se están utilizando los fondos que todavía están en las cuentas municipales y que las empresas no cobraron por su incumplimiento