Desde el municipio de nuestra ciudad sostienen que la situación está controlada en términos de atención y control de las víctimas. Ya hay una familia viviendo momentáneamente en el Unzué y otra vecina atendida en el hospital Dubarry.
Se anunció a su vez que desde la Coordinación de Defensa Civil se han desplegado diversas tareas.
Han afirmado que «hace algunos meses atrás el intendente Carlos Selva tomó la decisión de reeditar la conformación de la junta de Defensa Civil en la ciudad que lo tiene a él, por ser intendente, como líder. Fue así que se concretaron reuniones con distintas fuerzas vivas e instituciones de la ciudad para ir dándole forma a una nueva junta. Ya unas semanas después nombraban al bombero Juan Artelino como coordinador de Defensa Civil. Vale decir que esta determinación fue por demás de oportuna, ya que el diluvio de esta semana puso en funcionamiento un mecanismo de trabajo en contingencias que pudo llegar al vecino perjudicado con las lluvias.»
La palabra de Alterino también se conoció. “Todo comenzó con la lluvia que se dio entre martes a la tarde y miércoles a la mañana. En ese lapso de tiempo cayeron más de 100 milímetros y se hizo complicada la situación. Fue así que activamos todos los mecanismos desde Defensa Civil para trabajar con los vecinos perjudicados”, contó el coordinador Artelino.
«La cantidad de agua caída provocó la crecida del río Luján, que se salió de su cauce. Esta situación traumática se repitió en otros distritos que tienen al río como eje de su vida comunitaria como sucede con los municipios de Suipacha, Luján y Pilar. Por eso la primera medida tomada por el intendente Selva fue la de comunicarse con los primeros mandatarios de la región y realizar labores en conjunto para aliviar la situación. En Pilar y Luján se abrieron compuertas sobre el río para facilitar el escurrimiento de las aguas y soliviar la crecida en Mercedes.», afirman desde esferas comunales.
Los puntos más conflictivos de la ciudad están marcados en la zona del Parque Independencia, donde el agua llegó hasta la calle 60, en las barriadas más cercanas al río como Marchetti y La Franja y en la zona del campo de deportes de la AJB, la 60 entre 39 y 43. En estos lugares se centraron la mayoría de los trabajos.
El actuar municipal
Selva tomó la fuerte determinación que la estructura municipal en su conjunto estuviera al servicio de las decisiones que tomase el coordinador de Defensa Civil Juan Artelino. “Enseguida coordinamos trabajos en conjunto con las diferentes áreas municipales y con los Bomberos Voluntarios. Empezamos a llegar a las zonas más afectadas”, aseguró el coordinador.
El municipio llegó a los barrios más complicados a través de diferentes áreas. La subsecretaría de Servicios Públicos puso en funcionamiento camiones y operarios para adentrarse en las zonas más inundadas y ayudar a los vecinos. La Secretaría de Desarrollo Social puso a su personal a trabajar en la calle para hacer llegar a los mercedinos la ayuda necesaria: comida, colchones, frazadas y demás elementos que garanticen un mejor pasar en un momento tan traumático.
Por su parte la Dirección de Seguridad buscó garantizar la seguridad de los vecinos a la hora de evaluarse dándose situaciones especiales, ya que muchos damnificados por las lluvias no querían dejar sus hogares por temor a robos, más allá que desde el área municipal pertinente se les aseguraba un control.
Instituciones
El Unzué fue tomado como centro de evacuación en caso de ser necesario, el Hospital Dubarry se puso en estado de alerta y la policía acompañó en los trabajos realizados en las zonas afectadas.
Más allá de las previsiones que se venían haciendo en materia de Defensa Civil, la caída de más de 140 milímetros en tan breve tiempo provocó la crecida del río Luján, que no se concretaba de esta manera desde hace unos cuantos años.