Se supo que la Policía de nuestra ciudad debió actuar al menos en dos ocasiones con la detención de personas. Las cuatro noches tuvieron en términos globales un muy buen clima, sin violencia, arrebatos ni cosa semejante, salvo algún muy aislado hecho. Sin embargo, sí hubo dos detenidos.
El primero de ellos fue la noche del sábado en pleno corazón del carnaval cuando efectivos de la Comisaria local junto a personal de la Policía Federal observaron a un joven que estaba en estado de ebriedad mostrándose agresivo con los asistentes que se cruzaba. Al actuar y demorarlo le realizaron el cacheo de rutina y hallaron que tenía una cuchilla de grandes dimensiones entre sus ropas. Fue detenido por seguridad de todos y puesto a disposición de la justicia.
El segundo hecho destacado fue en calles 29 y 30 donde varios jóvenes menores de edad agredieron a una señora mayor a la cual le provocaron lesiones de menor gravedad en diversas partes del cuerpo. No se supo qué motivos tenían.
Otro momento de actuación fue cuando un grupo de jóvenes se peleaban, en bandas, donde la Policía buscó disolver la situación y también fue parte de los golpes.
En el marco de miles de personas esta serie de actos son una pauta de que, a pesar de ellos, la fiesta se vivió con normalidad.
