La Universidad de Luján empezó a utilizar las primeras aulas que se comenzaron a edificar en enero del 2012 gracias al dinero proveniente de la Reparación Histórica lograda en la gestión del ex rector Osvaldo Arizio.
En lo que se conoce como el «pabellón 100», que es el principal dentro de la Sede Central, que se vio reducido por las primeras demoliciones efectuadas con el objetivo de utilizar el espacio con las nuevas edificaciones.
Al edificio inaugurado en Campana y la obra que se está terminando en San Miguel se vendría este año la finalización del nuevo pabellón central.
En el sector de las «aulas cien» ahora conviven dos sectores: el viejo de la primera época y el nuevo generando un contraste en calidad edilicia muy fuerte.
La Universidad Nacional de Luján fue la única cerrada totalmente por la última Dictadura Cívica Militar en momentos en que la dirigía Emilio Fermín Mignone.