Coherentes con nuestra historia de defensa de la soberanía nacional, y defendiendo los intereses populares, desde el Frente PODEMOS queremos expresar nuestro rechazo a un nuevo proceso de entrega, que en una mas de sus permanentes contradicciones, el gobierno nacional realiza un acuerdo al mejor estilo menemista, junto a una empresa multinacional y norteamericana como Chevron, quien no solo es una de las mas contaminantes, sino también un ejemplo de las empresas que no cumplen con lo pactado ni con los requerimientos judiciales de los países a los que depreda.
Hace apenas un año, el congreso nacional aprobaba por mayoría la estatización del 51% de las acciones de nuestra YPF, que a nuestro pensar debía ser del 100%, la cual se encontraba en manos de la española Repsol. En ese momento, los argumentos principales que venían del gobierno (integrado por quienes promovieron la privatización en los ´90) eran la necesidad de contar con una empresa que sea rentable y que garantice la soberanía energética para profundizar el modelo de industrialización que ellos solo ven, ya que nosotros sólo observamos un modelo productivo netamente agro-minero exportador, basado en el monocultivo de la soja y en la voladura de nuestros cerros junto a la contaminación del agua por parte de la megaminería, de la mano de la empresa canadiense y socia del gobierno, Barrick Gold.
Por otro lado, el acuerdo con Chevron fue firmado bajo las condiciones que dicha empresa exigía y que el gobierno nacional le concedió sin modificarle una como, como por ejemplo:
a) Comerciar libremente en el mercado externo el 20% de la extracción (antes era 0%);
b) tendrán el 100% de libre disponibilidad de las divisas por exportación (antes era 30%);
c) en los períodos en que haya que importar gas o petróleo, pero al quinto año de la aprobación del recibirán subsidios para que no tengan un precio inferior al de exportación (llamado precio internacional), en cuyo caso no se imputarán las bajísimas retenciones que tuviera que pagar;
d) las petroleras tendrán un mecanismo de compensación para el subsidio del punto anterior;
e) por la comercialización interna (venta a refinerías locales) tendrán derecho prioritario a adquirir divisas de libre disponibilidad en el mercado único y libre de Cambios hasta en un 100%;
f) la ley establece en las concesiones clásicas 25 años de duración con un prórroga posible y fundada de 10 años. Ahora, contra la ley, el decreto ofrece prorrogar el período ante el pedido de las petroleras, porque el fracking es más costoso y tiene más corta maduración (se «agotan» antes). Para eso, el decreto establece que a los 25 años se «adiciona en forma anticipada simultánea con la nueva concesión la extensión del plazo de 10 años
También es necesario recordar que Chevron fue condenada en Ecuador por contaminar 500 mil hectáreas. Derramó 103 millones de litros de crudo, arrojó 63.000 millones de litros de agua tóxica arrojada a ríos y afectó a 30 mil personas. Luego de un juicio de veinte años, fue encontrada culpable de contaminación y obligada a pagar 19.000 millones de dólares, pero rechaza cumplir la condena. Sus activos fueron embargados en Argentina, pero el Gobierno pidió el levantamiento de esa medida y la Corte Suprema de Justicia falló a favor de la petrolera.
Por último, debemos mencionar la metodología que utilizará en la extracción, que no es otro que el FRACKING, una técnica de extracción de gas y petróleo de yacimientos no convencionales, generalmente de formaciones de esquistos (shale), arenas compactas (tight sands) y mantos de carbón (coalbed methane). Estas formaciones geológicas se ubican a varios miles de metros de profundidad y para acceder a ellas se debe perforar hasta la formación que alberga los hidrocarburos, empleando una técnica de perforación mixta. En primer lugar, se perfora verticalmente y posteriormente se continúa de forma horizontal, a lo largo de varios kilómetros. Los yacimientos no convencionales donde se utiliza el fracking son formaciones poco permeables y compactas, en las que los hidrocarburos se encuentran dispersos. Para liberarlos se debe fracturar la roca inyectando millones de litros de agua a alta presión (98%), mezclada con arena y una serie de aditivos químicos (2%); la cantidad de litros varía en función de la cantidad de fracturas que se realicen por pozo. Esto posibilita que los hidrocarburos asciendan a la superficie junto con parte de la mezcla inyectada, denominada reflujo (se recupera una cantidad que varía entre un 9 y un 35%). El resto queda en el subsuelo. En 2011 un informe de la Casa de los Representantes de Estados Unidos dictaminó que de los 2500 productos empleados en la fractura hidráulica, más de 650 contienen químicos potencialmente cancerígenos. Esto pone en riesgo las aguas subterráneas y superficiales ya que la ‘sopa química’ que se inyecta durante la fractura puede filtrarse por problemas de cementación de las cañerías o migrar más allá de la formación geológica que se pretende intervenir, también derramarse durante su manipulación en superficie o tratamiento y disposición inadecuada de las aguas residuales. El gobierno de Neuquén estima, por ejemplo, que por cada pozo se utilizarán 20 millones de litros de agua en el proceso de fractura (fuente: http://www. argentinalibredefracking.org/ )
Ante el avance de los proyectos de entrega de nuestros recursos utilizando métodos contaminantes, que de manera directa e indirecta afectan a los mercedinos, debemos como sociedad oponernos a este acuerdo, sobre todo, porque pensamos en las generaciones futuras de mercedinos y argentinos que sufrirán las consecuencias de las acciones de un gobierno que solo piensa en el hoy y de empresas que solo quieren aumentar sus riquezas, y para eso es necesario el compromiso de todos, generando los espacios institucionales de participación popular, que desde nuestro frente venimos proponiendo, porque si trabajamos juntos, PODEMOS generar un cambio real y no ser mas de lo mismo.