Se llevó a cabo un nuevo encuentro del Concejo Deliberante con diversos temas, pero, quizás lo más destacado fue la Asamblea de Mayores Contribuyentes que aprobó la toma de créditos para el Municipio. Dinero que se sabe será utilizado para asfalto y la finalización del Barrio Favaloro en caso de que no lo haga Nación.
El hecho se dio por unanimidad. La Asamblea de Mayores Contribuyentes permitió dar lugar a tomar un empréstito por medio de una ordenanza pre elaborada por los Concejales que fue ratificada por la Asamblea. Todo nació desde un pedido del Departamento Ejecutivo.
El planteo tuvo modificaciones en el texto, pero, se avanzó con las modificaciones de los bloques, como las modificaciones pedidas por Milhomme o el Frente Mercedino.
El empréstito se logra con la participación de diversas instituciones, como el Concejo Deliberante, la Asamblea de Máximos Contribuyentes, el Tribunal de Cuentas, la Secretaría Económica de la Provincia de Buenos Aires y de la Nación. Banco Central y el Banco Provincia que es quién lo otorga. Todos estos espacios dieron su conformidad dado que la capacidad de endeudamiento de la comuna es correcto ya que sus presupuestos son actualmente superavitarios.
Serán 10 millones de pesos que tal como había anunciado el intendente Carlos Selva tiempo atrás serán utilizados para efectuar varias cuadras de asfalto en nuestra ciudad y el Barrio Favoloro, siempre y cuando el Estado Nacional no lo haga. Recordemos que el Plan ProCreAr se podrá ejecutar en nuestra ciudad con el compromiso de primero terminar el Favaloro. Si esto es así la Comuna podrá usar el dinero para otro fin, sino, cerrará dicha etapa con la culminación de las casas.
El empréstito será nuevamente visto por Nación, pero, en la primera atención que hizo no impugnó nada así que se entiende ratificará su posición de dar luz verde. Los pasos administrativos que faltan son los menores dado ya el camino recorrido para que el Municipio tome su primer préstamo grande de los últimos tiempos.
Se desea el plazo del otorgamiento sea el mínimo posible desde las entidades intervinientes, como la bancaria.