Los políticos quieren su verano

Por Sebastian Varceló //

Scioli2015

El verano es un momento del año para muchos de descanso, para otros, de acción en la relajada conciencia del vecino. Desde Mercedes a Luján, desde Pinamar a Las Grutas. Todos los espacios son tierra fértil para los políticos que hacen sus jugadas para quedar de la manera más positiva posible en la retina y memoria del vecino.

En Mercedes Castelucci hizo las suyas. Los medios de comunicación lo acompañan dado que es la re aparición política del verano. Buscó el relax para empezar a mostrarse de nuevo y desde un campo independiente al selvismo y al frentismo, aunque, más de uno cree es para los medios y llegado el momento se alineará.

Otros, dicen off the record, que hubo más regresos al redil, pero, por el momento se mantienen tras las cortinas. Sería el caso de un ex concejal que, sin chistar, dejó sus participaciones en Nación para pegarse, por lo bajo, al selvismo.

Sioli presidente, Massa Presidente, Espinoza gobernador, Selva conducción, todo vale a la hora de poner el apellido del candidato o funcionario en boca del vecino. Luján está pintada con la legenda de Scioli 2015. Mercedes con la de Massa y pasacalles en la ruta con Vidal en la provincia y Macri en la Nación.

En la costa atlántica Giustozzi, que quiere ser gobernador por el massismo, a como dé lugar, manda aviones con sus carteles para que en la guardia baja de los veraneantes quede la leyenda impregnada: +a Giustozzi +.

Espinoza por su parte no se quedó atrás y puso carteles en las rutas veraniegas con su foto y leyendas como: “45.000 estudiantes universitarios, más que veinte provincias” o “220.000 nuevos puestos de trabajos, más que 20 provincias”. De esa manera el intendente de La Matanza muestra como su ciudad, de enormes dimensiones, se convierte en un campo administrativo de dimensiones buscando así proyectarse como un administrador de grandes recursos, problemas y cantidades de ciudadanos.

Cada político. Cada hombre que juega en esa arena busca el mejor resultado para si, y, de paso, para su fuerza. También están las otras: las operaciones dentro de una misma fuerza contra alguno de sus miembros con objetivos varios, desde ponerlo en tensión a quitarse protagonismo, desde «quemarlo» a provocarlo. Todo vale, en el verano, todo vale.

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