Por Marcelo Denápole, concejal del Frente Renovador //
Siempre son controversiales los temas que tratan el planeamiento y ejecución de unidades de vivienda en nuestra ciudad.
Más aún, cuando los lapsos electorales apuraron la ejecución de un programa virtuoso contrastando con los tiempos de la planificación territorial de su operatoria.
Toda estrategia de programación política debe contemplar las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas, en el territorio donde debe aplicarse, previamente a su implementación.
Nadie puede negar las bondades del plan PROCREAR y su círculo virtuoso sobre la economía local.
Pero lo que resulta inconveniente al haberse cortado el previo vínculo diagnóstico institucional con las áreas técnico-sociales municipales, es cumplir a posteriori los requerimientos emergentes de una operatoria no planificada.
En el otorgamiento de cupos, no se tuvo en cuenta la oferta local de tierras de disponibilidad instantánea ni estatal ni privada en su valor venal de mercado.
Tampoco se valuó la provisión de servicios básicos para el agregado de una extensión de vivienda del tamaño de dos pueblos rurales al ejido urbano actual y menos aún se valoró el cúmulo de expectativas y ansiedades en los beneficiarios sorteados, agregando un peso más a su cargada mochila de frustraciones.
Presentados estos inconvenientes, la misma facción política que se acreditó las mieles del anuncio, quiere ahora despegarse de las hieles de la realidad, pretendiendo una aprobación instantánea de la venta de terrenos municipales con destino social destinados a ciudadanos que no califican en bancos ni entran en sorteos.
De esta manera se apuna a crear un Registro, anteriormente denegado al pedido del Intendente en el año 13, para que ahora sea Él quien reciba los reclamos que esta improvisación trajo.
A todo esto, se suma la exigencia disyuntiva de aprobación inmediata sobre tablas o la calificación de politiquería, palos en la rueda, ignorancia, etc. Toda con la oportuna citación y presencia de una tribuna con lógica ansiedad para la cual se efectuó la puesta en escena.
La postura del bloque oficialista lejos de descartar el proyecto, no fue otra que el envío de tamaña propuesta a su estudio técnico en comisión, el mismo proceder que se considera razonable para un “simple foquito” y que ahora se juzga irracional para tamaño emprendimiento de magnitud urbanística. Toda una proeza del planeamiento sustentable.
De todas maneras el Intendente ha mostrado buena predisposición para destinar una parte de los lotes existentes a esta operatoria, sin olvidar que a él le toca gobernar para todos y no para un sector específico.
Personalmente no he encontrado esta postura reflejada en los medios informativos y me creo en derecho y obligación de expresarla a los ciudadanos que orgullosamente represento.
Seria importante que antes que se destinen lotes para el plan PRO.CRE.AR. se realice el sorteo de las 42 viviendas del BARRIO FAVALORO , que aun están pendientes de adjudicar, y hay familias con espectatívas esperando hace 8 años. Creo que ya hemos esperado tiempo mas que suficiente y tenemos DERECHO A LA PRIORIDAD.
La oferta de lotes para construcción de vivienda y los precios de los mismos son el resultado de la poltica de tierras del municipio, la cual fue totalmente inexistente en los últimos 10 años. Mas alla del PROCREAR hoy en día nuestros hijos no pueden acceder a la compra de un terreno porque los funcionarios locales no han hecho sus deberes en materia de programación urbanistica y regulación fiscal. El m2 cuadrado de un terreno en la zona periurbana de Mercedes cuesta lo mismo que el M2 en Boston (EE.UU), una verdadera locura.