Según se supo, la Comisaria de nuestra ciudad, que mantuvo su estado de alerta, como es habitual, tuvo una navidad sólo con atenciones menores, en especial debieron efectuar «salidas» por peleas.
En la misma Comisaria se vieron registrados hechos de menor gravedad, muchos de ellos relacionados con peleas; pero estas peleas tuvieron su particularidad: fueron protagonizadas por los mismos familiares. El primero de ellos, ocurrido en Avenida San Martín y calle 109, cuando dos hermanos (una mujer y un hombre), estando con sus parejas, se agredieron mutuamente.
El segundo caso, ocurrió en la puerta de una quinta donde se llevan a cabo reuniones, ubicadas por la zona de “la curva del pajarito”, donde un hombre fue golpeado por uno de sus hermanos. Si bien se desconoce el porqué de las peleas, se sabe que en el segundo caso, habría tenido influencia directa la borrachera que tenían los que intervenían.
A estos hechos se le suman las clásicas caídas en moto y llamadas preventivas, pero, nada de «gravedad»