Serían al menos cinco hechos que ocurrieron en nuestra ciudad en lo que va del año que podrían estar vinculados por las similitudes en el modus operandi de los malvivientes. Los ladrones llegan, se encargan de reducir a los ocupantes, recorren el lugar en busca de dinero y electrodomésticos y se dan a la fuga.
El sábado 2 de abril, en horas de la noche, un matrimonio fue tomado por sorpresa por un grupo de malvivientes que los maniataron y le sustrajeron dinero y elementos de valor. Fue en una vivienda que se encuentra en ruta provincial Nº 41 a la altura del kilómetro 239, propiedad de la familia Rossello.
Al sábado siguiente -9 de abril- nuevamente tres personas, algunas de las cuales portaban armas de fuego, ingresaron a una vivienda ubicada en ruta nacional Nº 5 a la altura del kilómetro 107, donde reside la familia Llamosas. Ocurrió cerca de las 21 horas, y la modalidad fue la misma. Del lugar se llevaron varios elementos de valor y una suma de dinero que no se pudo precisar.
En tanto, este martes, pero en horas de la tarde, nuevamente un grupo de sujetos ingresaron a una vivienda pasando Tomás Jofré, por ruta provincial Nº 42 –frente a un reconocido spa – en momentos en que la misma se encontraba desocupada. Desafortunadamente, mientras ocurría el atraco la familia regresó y fueron intimidados y reducidos con precintos en una habitación. Nuevamente los ladrones se hicieron de algunos electrodomésticos y en este caso se llevaron la camioneta en la que se movilizaba la familia. Incluso trascendió que se habrían llevado armas del lugar.
Otro de los hechos ocurrió a mediados del mes de marzo, en ruta nacional Nº 5, y el restante a principio de año, también sobre ruta provincial Nº 41 donde el morador de una quinta fue asaltado por hombres que actuaron con similares características.
Los casos por “Robo calificado por el uso de arma de fuego, en poblado y en banda” tramitan por ante la UFI Nº 7.