En cancha de la Liga Mercedina, Quilmes comenzó ganando la primera final del Apertura pero luego la historia se le fue volviendo en contra, porque El Frontón se lo empató y en el segundo tiempo sufrió las expulsiones de dos jugadores importantes en el armado de Juan Ignacio Menendez, Lucas Montero y Leandro Schiavi, y ahora todo se definirá en San Andrés de Giles este domingo desde las 15.30 con transmisión de FM La Tribuna 103.5.
Durante la mañana del viernes en el programa El Pulso, que se emite de lunes a viernes de 8 a 12 por la emisora radial deportiva, se analizó el partido con sus protagonistas y el entrenador del único equipo que permanece invicto en el campeonato, Germán Stopiello, dijo que «fue un partido trabado, parejo, con mucha dinámica y fricción, pero no bien jugado y esperemos que sea mejor en la vuelta. Quilmes jugó cumplió mejor con su estrategia, salió a presionar desde el arranque con mucho entusiasmo y ganas y nosotros entramos dormidos, con mucha displicencia, como si fuera un partido más de ronda. Tuvimos muchos errores atrás, con desatenciones, hicimos un mal partido, me quedé disconforme con lo que hicimos. Pero creo que el empate fue el resultado justo porque ninguno de los dos hizo mérito como para ganar la primera final. Por ahí el cansancio psicológico de jugar cada cuatro días influyó, tengo chicos que viven en Buenos Aires que tuvieron que viajar, son cosas que suman pero no son excusas».
«Estoy lejos de la expulsión de Schiavi como para verla, pero me pareció una infracción fuerte y la de Montero al tener amarilla, la falta que hizo era para otra amarilla y por eso se fue expulsado. Nosotros tenemos jugadores golpeados y los dos equipos vamos a llegar mermados porque a Medina lo perdemos por amarillas. Más allá de todo, el arbitraje creo que fue bueno y no incidió en el resultado», comentó el DT en cuanto a lo ocurrido en la cancha. «La vuelta creo que va a ser similar. No vamos a salir desesperados a regalarnos. La idea es jugar como lo hacemos siempre, manejando la pelota y presionando en campo rival. A veces lo logramos. Con Juventud jugamos muy bien y ayer muy mal. Estamos tratando de reacondicionar la cancha para que el terreno esté lo mejor posible».
Por el lado de Quilmes, dialogó Washington Balmaceda, uno de los refuerzos que en el mediocampo tuvo el equipo de Menendez y comentó que «los dos partidos que jugamos fueron con poca diferencia de días y con un campo de juego con mucho barro, lo que complicó un poco nuestro juego, pero por suerte los resultados nos acompañaron». En cuanto al partido de la noche del jueves, dijo que «ellos hicieron un buen partido, creo que nosotros también porque con dos hombres menos lo pudimos aguantar» y respecto a eso, destacó que «son dos bajas muy importantes, pero Quilmes tiene un plantel muy unido y los chicos que entren estarán a la altura de la circunstancia. Son finales, son partidos aparte».
«Es una final, deberían haberse limpiado las amarillas para los dos equipos así pueden jugar con lo mejor ambos, ojalá eso lo reviertan», al referirse a que muchos jugadores llegaron a este partido con acumulación de tarjetas. «No queremos que nos pase lo mismo que en el Federación. Si no se da, no es un fracaso. Es un equipo que se preparó para esto y el objetivo lo cumplió. Ojalá nos levantemos mejor que ellos el domingo y ganemos».
En cuanto a su entrenador, Juan Ignacio Menendez, señaló que «es la primera vez que alguien tan joven me dirige. Juanito tiene personalidad, puede manejar al grupo y tiene la ayuda de muchos de los jugadores grandes y se le hace más fácil. Tiene futuro y nosotros lo queremos ayudar para que le vaya bien porque tenemos un plantel muy unido y maduro, porque ayer demostramos que con dos menos supimos hacer bien las cosas para no perder el partido. Tenemos que mejorar un poco en el mediocampo con la generación de fútbol, pero es entendible porque hay muy pocos espacios».