Una calle entramada de guardapolvos
un rumor de alondras subiendo por calle 7,
las veredas eran fronteras infranqueables
para transeúntes de mirada ajena/
cerca en la plaza, los tilos ya destilaban
su perfume de reclamos y de primavera.
No hay juventud sin ideales
como no hay lucha sin tus ojos claros
el boleto se grita a voz en cuello
las manos se toman por primera vez,
o como nunca antes
y como jamás después.
Tu sonrisa tierna, ese destello…
tu amistad, eh, compañero!
tomamos por asalto a los cielos
la paciencia parecía tan corta/
y los sueños tan lejos del suelo.
Quedaron para siempre en mis recuerdos
las lágrimas se secan atravesando el tiempo
nunca pensé poder llegar tan lejos
sólo ustedes permanecen jóvenes
sólo sus ojos me impiden ser más viejo.
Oscar Dinova (Broto para ellos)
Setiembre 2016 / Mercedes