Recordaron al joven de 22 años que fue secuestrado y desaparecido en la última dictadura cívico militar poniendo su nombre en la casa donde vivió su niñez y adolescencia. Su hermano Marcelo evocó los años de niñez y adolescencia, pero también el trabajo de su padre redactando habeas corpus y denuncia por la violación de los derechos humanos.
“Pancho, mi hermano, fue privado de su libertad en Buenos Aires en las inmediaciones de las calles Avenida Independencia y Entre Ríos. Desde entonces, nunca más lo volvimos a ver. Comenzó una tragedia para la familia, para la República, y además, el adquirió la categoría de un sujeto desaparecido. Un individuo sin derechos, sin un debido proceso, sin estar a disposición de un Juez y sometido a la violación de los derechos humanos por parte del gobierno cívico militar de ese entonces”, expresó Marcelo Heredia, abogado.
“Pancho se tenía que encontrar con otra persona ese 9 de noviembre de 1976. Era un tipo de 22 años de edad, un chico con una calidad y un talento, no porque haya sido mi hermano lo digo, pero tenía mucha alegría desde chico. Pancho también tenía un compromiso de vida con los más pobres”, destacó el hermano de Francisco Heredia, para también recordar a Carlos Tillet, amigo de su hermano.
“En esta casa, aquí en 26 y 23, pasamos momentos felices y dolorosos. En este barrio, en esta casa, nosotros crecimos siendo niños, adolescentes y jóvenes. Aquí también sufrimos. Vi sufrir a mis padres cuando le comunicaron que Pancho había sido privado de su libertad ‘en una cita’, así denominaban los encuentros que se tenían con otros militantes. También esperándolo para las fiestas, para su cumpleaños en febrero”, recordó Marcelo.
“En esta casa además, se redactaron los hábeas corpus a favor de mi hermano y de muchos chicos más. Aquí nos empezamos a reunir un grupo muy pequeño de familiares, mientras afuera la vida corría por otros carriles. Nadie admitía lo que estaba pasando en este país. En esta casa mi padre redactó la denuncia de la violación de los derechos humanos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y también fue motivo de una irrupción del Ejército por haber firmado una solicitada a favor de gente que estaba desaparecida”, agregó.
El descubrimiento de la placa lo hizo Marcelo Heredia junto a su hijo. La placa fue bendecida por el Padre Tom O’Donnell en nombre de la Parroquia San Patricio que además solicitó y adelantó que el próximo 24 de marzo, recordarán a los alumnos del Colegio que así como Francisco Heredia fueron desparecidos o asesinados durante la Dictadura Cívico Militar.
Fuente: Clarisa Altieri