Se trata de un programa que crea un banco municipal de pelucas para pacientes oncológicos u otras enfermedades cuyos tratamientos producen la caída del cabello. Desde el lunes próximo, en el CIC se recibirán las donaciones de mechones de pelos y se realizarán las pelucas.
A través de una conferencia de prensa el Municipio lanzó oficialmente un programa solidario que tiene como fin conformar un banco municipal de pelucas para pacientes oncológicos. El proyecto se titula Mechas Solidarias y es un trabajo conjunto entre el CIC, Concejo Deliberante, LALCEC y peluqueros de la ciudad y busca promocionar la solidaridad de los vecinos para con los pacientes de enfermedades que tienen como consecuencia la caída del cabello.
En el encuentro con los medios locales, el Jefe Comunal Juan Ignacio Ustarroz estuvo acompañado de la Secretaria de Desarrollo Social Jorgelina Silva, la Coordinadora del CIC Dra. Betiana González y las concejalas Patricia Prenitune y Mariana San Martín.
“Mechas Solidarias surge por iniciativa de la concejal Patricia (Prenitune) quien vio como una ONG de otra ciudad realiza pelucas para mujeres enfermas de cáncer. Tiene varias aristas. El primero es la salud, pero también está la solidaridad. Es así que se diseñó, articulando con LALCEC y los peluqueros, una campaña para que la gente done un mechón de pelo, con el cual luego un equipo de voluntarios hará las pelucas que serán entregadas a las pacientes que las necesiten”, resumió Ustarroz enfatizando y agradeciendo la colaboración de los peluqueros que se sumaron y de LALCEC ya que la propuesta será una forma de difusión en la detección temprana del cancer.
“Quienes tienen que afrontar algo tan terrible como es la lucha contra esta enfermedad tiene que estar fuerte y el aspecto anímico es muy importante y a veces, más allá de la cuestión estética, esto tiene un impacto nocivo en muchas mujeres. Este banco de pelucas será para entregarles a las pacientes un kit en comodato con la peluca y otros accesorios. Las personas la utilizarán por el tiempo que lo necesiten. Para mí es un orgullo poder lanzar este programa y agradecer a los vecinos que ante la primera convocatoria dijo que sí, se sumaron y aportaron ideas para hacer este proyecto realidad para personas que atraviesan una situación muy compleja y muy traumática”, agregó Ustarroz.
Por su parte, tanto Prenitune como González explicaron que los lunes, de 9 a 12 horas, en el CIC (calle 10 y 65) se confeccionarán las pelucas y allí recibirán a las personas que quieran donar un mechón de cabello. “En una primera etapa también recibiremos pelucas en desuso y postizos, todo pelo sirve, pero también los mechones de pelos de todo tipo. El centro de recepción es el CIC, pero también las peluquerías adheridas que estarán identificadas con el logo de la campaña. A las pacientes les entregaremos un kit con elementos necesarios para preservar las pelucas, se les hará un comodato por seis meses, renovable. Pero en principio necesitamos la materia prima, que es el pelo”, explicó la Concejal.
“Tenemos algunos voluntarios que trabajarán todos los lunes en el CIC en la confección de pelucas. Hay varias etapas de la confección de la peluca es por eso que las personas que no tienen experiencia pueden ayudar también y sumarse con voluntarios. Quienes quieran donar el cabello pueden traerlo al CIC o venir que ahí se lo cortamos… Como Estado presente, queremos acompañar a las mujeres que están transitando una enfermedad que les haga caer el cabello. No solo es el tratamiento quimioterapico sino también alguna alopecía por otro tipo de enfermedad. Mujeres y niñas que tengan esta problemática podrán acercarse al CIC donde tendrán una entrevista porque también se le dará contención profesional”, agregó la Dra. González.
Es así que tanto en el CIC y en LALCEC como en las peluquerías adheridas, los donantes podrán llevar el mechón, aunque también podrán ir a que se le corte el mechón en algunos de estos lugares. El cabello puede ser en capas, canoso, teñido o virgen, lo ideal es que tengan una medida entre 25 y 30 centímetros, el cabello debe estar limpio y seco, además de atado en el extremo cercano a la raíz. Este mechón se coloca en una servilleta de papel para luego ser colocado a una bolsa.