Por TeCleArte – El mundo artístico mercedino amaneció con una impactante noticia. El “joven adulto mayor” de tan solo 85 años – aunque no le gustaba decirlo – y artista plástico Fernando Chirieleison falleció en la madrugada del martes 13 de junio.
Fernando fue una amante del arte en general. En su juventud compartió el Círculo Artístico junto a Héctor Cueto y Octimio Landi, dos de sus grandes amigos con los que ahora estará compartiendo impresiones artísticas. Trabajando en Buenos Aires asistió a los talleres de Alicia Benítez, Miguel Ragonesi y Hermenegildo Sabat.
Siempre será el padrino de la artista plástica Marcela Cueto y con ella reactivó su pincel después de jubilado. En los últimos años, Fernando actualizó sus conocimientos y sus práctica con Marcela, pero también con Pablo Russo, con María Eugenia Scioli y con Jorge Blanco.
De vuelta al ruedo en la pintura, Fernando volvió a participar de los salones de pinturas de Mercedes y localidades aledañas. Fue seleccionado en San Andrés de Giles y Luján. El Museo de Arte de Mercedes lo distinguió con una exposición solo de él el año pasado, una retrospectiva de su trabajo y donde se conocieron sus “impresiones de la vida”.
Su trabajo y ganas de crear y participar activamente en la vida artística y pictórica de la ciudad era cada día más grande. A medida que creaba, le sacaba una foto a su cuadro y los exponía en su perfil de las redes sociales. Aprovechó para viajar por distintos lugares del mundo, más allá de verlo todas las mañanas o la tarde caminar por la ciudad.
El jueves pasado ganó la instancia local en la disciplina pintura de los Torneos Bonaerenses para Adultos Mayores, y el viernes se inauguró en el MAMM una muestra colectiva con Artistas del Pueblo de la que él fue parte y cuyo cuadro está expuesto aún. Además estaba ultimando los detalles de una nueva pintura para presentar en el Salón de Pintura “Ciudad de Mercedes” y otra más para otras exposición colectiva a inaugurarse el 23 de junio.
Un dolor muy fuerte se siente cuando una persona cercana fallece. Fernando Chirieleison no sólo era una persona cercana, era un tío. De esos tíos que se adoptaron por la familia del Teatro Talía. Un nuevo tío que se sumó a mi familia hace poco más de diez años. Con él aprendí miles de cosas en estos últimos tiempos. Principalmente a ver, conocer y redescubrir el mundo del arte en muchas de sus disciplinas. Sus pinturas, sus críticas de cine, su amor por el teatro y la música. Gracias por haber compartido todo esto y más.