En la tarde del miércoles, alrededor de medio centenar de trabajadores de la fábrica de Aceros Borroni se hicieron presentes en la sede de la UOM, en calle 32 entre 31 y 33 donde muchos de ellos fueron a pedir la desafiliación y en conjunto solicitar un encuentro con el secretario general, Humberto Perdiguero.
Sin embargo, tras hacerse presentes y plantear el encuentro a las personas que se encontraban en el lugar y tras una comunicación telefónica, aguardaron por el lapso de una hora para después retirarse. No sin antes manifestar que la desafiliación igual la realizarían por otras vías.
Los trabajadores en el lugar plantearon que la situación era diferente a lo plantado por el gremio. “La realidad es que nos encontramos con un paro el lunes y nunca fuimos consultados sobre eso. Nosotros no estamos de acuerdo y no nos dejan entrar a trabajar. Trajeron gente de otro lado para hacer esta medida”, comentó Oscar Casco y agregó: “casualmente ayer pude ingresar a trabajar y cuando salí me empujaron y me quisieron pegar. Y no soy el único. Hay muchas personas que quieren entrar a trabajar. Este hombre trae colectivo de otro lado para una medida que decidió él porque el 80% de la fábrica no está de acuerdo”.
Por su parte, Silvina Campanari señaló que se acercaron a la UOM a plantear una “desafiliación masiva. Somos más de 40 personas que estamos acá, y más personas querían hacerse presentes hoy pero no pudieron. La idea es desafiliarse porque no estamos de acuerdo con lo que ellos están haciendo. No nos representan”.
En tanto, Cristian Ortolá explicó: “la idea de los compañeros es que se terminen las mentiras en Borroni. Para la sociedad de Mercedes pareciera que es la peor empresa y la realidad es que nosotros estamos recibiendo muchas cosas que la gente no sabe. Hay mucha gente que ha necesitado ayuda con la familia y han colaborado. Es una empresa donde se puede dialogar”.
“Lo que está pasando ahora es por cuatro personas que decidieron un día, el viernes, que iban a hacer un paro. Nosotros llegamos a la empresa como todos los días y nos encontramos con algo muy triste: las puertas cerradas, no nos dejaban entrar, ni dejar los vehículos. Estuvo todo el mundo preocupado por lo que le iba a pasar a sus cosas. Y solo con ver a simple vista se dan cuenta de que es gente que no pertenece a la empresa. Son gente que viene de afuera a sembrar miedo”, manifestó y agregó: “Hoy la gente tiene miedo, porque estamos viviendo algo a lo que no estamos acostumbrados. Realmente no esperábamos que pase esto. Hay violencia, ayer (por el martes) trajeron hasta mujeres a gritar. Es un ambiente muy feo. Y eso es lo que está viendo la sociedad de Mercedes y lo que reflejan los diarios: las mentiras del secretario de la UOM. Creo que de toda la empresa no hay una sola persona que sepa los motivos de este paro. No entendemos nada de lo que está planteando. Y el despido que se dio, el chico nunca planteó que hagamos un paro. Al final siempre pierde la gente. La verdadera unión de la que se habla es la que tenemos nosotros, los que estamos acá y los que nos acompañan porque realmente es una empresa donde estamos todos unidos, somos casi una familia. Son cuatro o cinco personas las que quieren corromper lo que se ha logrado”.
Por otro lado, lamentó: “hoy la empresa le permitió a chicos de la escuela Industrial ingresar a realizar pasantías. Menos mal que están de vacaciones, sino qué dirían esos chicos y sus familias sobre el lugar donde van sus hijos. Es muy triste y se tiene que conocer que en Borroni se trabaja bien, el sueldo se depositó y me parece que tenemos que cuidar empresas como esta porque hay pocas, y más aún con estas características”.
Más tarde, otra de las trabajadoras Carina Morales denunció que “lo que queremos es trabajar. Es nuestro derecho y ellos tienen que respetarlo. Queremos que nos dejen pasar, que dejen salir y entrar a los camiones. Con esta medida los más perjudicados vamos a ser nosotros. Indudablemente esto es una situación política, el 80% de la fábrica desconoce porqué se está haciendo esto y pedimos ir a trabajar. Nos están coartando el derecho de ganarnos el pan y mediante la violencia”