Ayer jueves circuló un comunicado de prensa donde la empresa afirma no adeudar premios y cuestiona la medida de fuerza que –al decir de los empresarios- pone en riesgo la fuente de empleo de cerca de 200 familias mercedinos.
Casi simultáneamente, los trabajadores que el miércoles fueron a reclamar al gremio el cese de la medida de la fuerza fueron al Ministerio Público Fiscal a denunciar las amenazas y la imposibilidad de prestar tareas. Con posterioridad a ello estuvieron reunidos con el Delegado Regional del Ministerio de Trabajo, Jorge Retegui a quien le solicitaron que interceda.
Ya cerca de las 14:00 se reunieron con el intendente municipal Juan Ustarroz quien tras escuchar la problemática prometió entrevistarse con los diversos actores a la espera de poder destrabar el conflicto.
No pudieron entrar
Desde el Ministerio Público Fiscal los trabajadores le garantizaron presencia policial en el lugar a las 8:00 para ingresar. Y a esa hora se hicieron presencia las fuerzas de seguridad y un grupo de entre 30 y 40 trabajadores. Para sorpresa de todos, los manifestantes les impidieron el acceso a los empleados de la firma (sin amenazas) y solicitaron la orden de un juez para permitir el ingreso.
Tras esto –siendo ya el quinto día de inactividad- los trabajadores volvieron sobre sus pasos rumbo a la Fiscalía a ampliar la denuncia formulada en la jornada de ayer.
Esta situación hace poner en crisis a una empresa que tiene serios problemas de financiamiento producto de la crisis generalizada del sector. Y muchos trabajadores temen que la familia Borroni pueda llegar a decidir poner fin a la actividad.
Interna gremial
No está claro porqué Perdiguero arremete con tanta dureza con Borroni. Sin ir más lejos, el paro realizado ante Sansur (cuando un trabajador perdió 4 dedos de su mano) fue mucho más benévolo.
Existen en principio dos hipótesis: en Borroni hace mucho que viene pugnando por un lugar Jesús Guerra, considerado un dirigente duro aunque enrolado en la CTA. Guerra contaría con el acompañamiento de Abel Furlan, que integra el secretariado nacional de la UOM y que se habría hecho presente en este conflicto. En esa hipótesis Perdiguero estaría impostando un ala dura, con el solo efecto de congraciarse con Furlan, quien vino a Mercedes en reiteradas oportunidades.
La otra hipótesis es que Ramón Perdiguero busca posicionarse políticamente. Y es que si bien estuvo dando vueltas por el peronismo, su nombre finalmente apareció en la lista de pre candidato a concejales de la Agrupación 25 de Mayo. Una agrupación que nació cercana a Cambiemos por la vinculación con la familia Mahíques y que ahora busca impulsar el vecinalismo.
Ambas hipótesis deja en claro una cosa: el paro salvaje a Borroni, no tiene como eje central el bienestar de los trabajadores.