En su cuarta participación consecutiva el murgón se preparan para dar un show renovado en todos los aspectos. Este año aspiran a demostrar el crecimiento que tuvieron tanto en lo artístico como grupal. También actuarán en distintos carnavales de la zona.
A menos de un mes de que se realicen los carnavales mercedinos, murgas, batucadas, comparsas y carrozas ya están a pleno con los preparativos para las cuatro noches.
En 23 y 42 realiza sus ensayos la Murga de la Ribera, preparando su cuarta actuación carnavalesca con el condimento de que no solo estarán en nuestra ciudad, sino también en ciudades vecinas a las que fueron invitados.
El murgón reúne más de 250 almas, divididas en siete alas y cada una con sus características especiales como las mascotas, pre-murgueras, murgueritos, fantasía y murgueras, entre otros.
Para los organizadores, este año fue de mucho crecimiento y cambios que hacen a la unidad y a la identidad murguera.
Renovados
Entre las novedades, este año se añade a los ya tradicionales azul y amarillo el color blanco. Se renovaron los modelos de las levitas y galeras; y la fantasía promete singulares atractivos.
La temática de este año tendrá toques circenses que sumará a los pasos y música característicos de la murga porteña dejando un distintivo a su paso.
Además, redoblaron esfuerzos en la actuación sobre escenario y la canción para brindar un espectáculo de mayor calidad en los corsos.
Lucas Melo y Leila Gollo, directores generales de La Murga de la Rivera destacaron: “Falta un mes pero estamos con todos los preparativos a full. Se sumó mucha gente nueva, y vamos a tener un cambio estético bastante importante. Creemos que la diferencia en esta pasada se va a notar”, y agregaron que las inscripciones ya cerraron.
En cuanto a las modificaciones, Lucas resaltó: “El color blanco lo agregamos para que sea mucho más inclusiva, que se refleje que es un murga de todos y ya no seguir siendo identificados como nos pasaba con los colores de un equipo de fútbol en particular”.
Si bien el nacimiento se dio de esa manera, la murga fue creciendo y marcando una identidad propia que llevó a desprenderse de esa primera idea. “Muchos de los integrantes están contento con el agregado de color porque es una identidad propia de la murga y de todos los que la integramos”, añadió.
Por otro lado, remarcaron que también “le pusimos mucho énfasis al escenario. Creo que siempre tuvimos como punto fuerte el desfile, y a veces el escenario de las murgas – que se refleja en el carnaval local y que entendemos que se instauró hace poco – no tiene el mismo nivel. Empezamos a trabajar con voces, con niveles, cambios en la música. Buscamos que el escenario refleje lo que mostramos también en la pasada”.
Más unidos que nunca
Para quienes coordinan el murgón, este año fue de mucho crecimiento. Fue un año de hacer un montón de cosas: la barrileteada en La Trocha, polladas, rifas, bingo, huevos de Pascua y muchas cosas más para recaudar fondos.
“Creo que lo que más destacamos es que pudimos organizarnos de otra manera. Contamos con siete alas y cada una tiene su director que es el encargado de todo lo que tiene que ver con ese grupo; desde lo que tiene que ver con los pasos, hasta la autogestión para los trajes, trabajo con los papás de los chicos más chicos, actividades para armarse económicamente también. Creo que es destacable todo esto, porque es una forma de poder estar más cerca de cada uno de los integrantes”, señaló Lucas.
Para Leila “es una forma también de estar más cerca de las necesidades de quienes integran cada ala en un montón de aspectos, desde lo que es la murga hasta cuestiones más sociales. Antes, siendo dos directores quizás no se llegaba hasta el último eslabón de la cadena, y contar con tantos directores se puede trabajar de otra manera y estar atentos a todo lo que suceda”.
En tanto, Lucas expresó: “para nosotros es importante la cuestión social también. Se ha logrado un trabajo en conjunto, y creo que en estos cuatro años que llevamos logramos reflejar que no es la murga de Leila y Lucas, sino de un conjunto importante de personas que laburan para esto. Logramos grupos autónomos y muy unidos, y que a su vez contemplan e integran la murga con un clima de confianza muy lindo”.
Crecimiento
Tras cuatro años, donde no solo se destacaron en los carnavales con premios como el “Revelación” en su primera actuación y el primer y segundo premio en el rubro; internamente ellos ven muchos cambios y crecimiento.
“En la primera etapa de la murga laburamos para poder generar una identidad como murgueros. Ni la gente, ni mucho de los integrantes veníamos de la murga. Después, se logró una identidad como Murga de la Ribera también desde lo social también. Y hoy estamos en una etapa, de identidad de grupos: ser músico de la rivera, mascotita de la rivera, murguero de la rivera”, indicó Lucas a lo que Leila agregó: “Este año también nos diferenciamos de los anteriores porque lo planteamos como un año de salidas a mostrar lo que hacemos en distintas ciudades y no solo abocarnos a Mercedes. Es mucho el trabajo que se hace y sentimos que nos quedan corto cuatro noches. El fin de la murga es todo el carnaval, en todos los lugares que surja la posibilidad. Además está bueno el salir a conocer, aprender y poder enriquecer el carnaval local”.
Es así que el fin de semana que pasó actuaron en Patricios, 9 de Julio y posteriormente viajarán a Navarro. Y en febrero, además del carnaval mercedino, y hay una propuesta para ir San Andrés de Giles y a Luján.
A los vecinos
Los martes, jueves, sábados y domingo, la murga ensaya en la zona de La Trocha. Desde el murgón agradecen a los vecinos del lugar y piden paciencia ya que quedan pocas semanas de ensayo. “Entendemos que estamos con los bombos y cortamos de a rato la calle. Les pedimos un poquito de paciencia que son unas semanitas más para poder preparar una linda actuación para el carnaval”, expresaron.
Por Yesica Landola
