El color violeta será la que las identifique en el reclamo ante una sociedad que sigue siendo machista y en el homenaje y reconocimiento a la mujer trabajadora. Para organizar los detalles del acto de marzo, volverán a reunirse el viernes 16, 19 horas, en el Plaza San Luis.
La segunda Asamblea de Mujeres Mercedinas se llevó adelante en la tarde del viernes de febrero. Un poco menos de 50 mujeres pasaron por el encuentro en el que se conversó propuestas, acciones, opiniones, pareceres, en torno al paro internacional de mujeres previsto para el 8 de marzo, y a las problemáticas que diariamente viven las mujeres mercedinas en sus trabajos, en las calles de la ciudad o en sus casas.
Sentadas en ronda en el patio de la Casa del Pueblo, el encuentro de mujeres fue fructífero porque las distintas opiniones y propuestas fueron escuchadas y analizadas. El punto en común de todas las presentes fue la preocupación de cómo todavía hay mujeres que son golpeadas, matadas, denigradas, discriminadas, y tratadas con inferioridad, en sus casas, sus trabajos, en la calle, en la atención pública de organismos públicos y privados. De cómo el machismo sigue imperando no permitiendo una real igual de derechos entre hombres y mujeres.
Eso busca el paro internacional de mujeres previsto para el 8 de marzo. Lograr que todas las mujeres puedan ejercer sus derechos. La bandera que reunirá a estas mujeres será la de la Asamblea de Mujeres Mercedinas y el color violeta será el que distinga a todas las mujeres que adhieran a la propuesta.
“En la Asamblea se empezó a elaborar un documento que terminará de armarse en el próximo encuentro. El documento establece como base la reivindicación de la mujer trabajadora. El eje, más allá de todas las demandas que se hacen, es sobre la mujer cómo mujer trabajadora. Una de los puntos que surgió es el hecho de que si una mujer hace paro, otras personas se darán cuenta de qué pasa si estas mujeres no están. ‘Parar para que vean qué pasa si no estamos’. Pasó la época de la sumisión. También queremos explicar que no es ‘contra el hombre’. Una cosa es ‘el macho’, que puede ser hasta una mujer, porque lo que estamos expresando es nuestra oposición a la violencia machista. No es contra el hombre. Por eso también convocamos a los hombres a sumarse”, cuenta Lucía Lascano, una de las mercedinas que integra la Asamblea de Mujeres local.
El paro propuesto para el 8 de marzo a nivel internacional, no implica, necesariamente, que la mujer no vaya a trabajar ese día. La invitación a adherirse es para visibilizar la problemática que muchas mujeres viven en cuanto al machismo en el sistema. Es por eso que proponen que en los lugares de trabajos, las mujeres puedan tomarse una hora y debatan sobre el rol de la mujer en el trabajo y en la sociedad.
“Paramos porque estamos cansadas de la opresión, de ser exprimidas. En el sistema general prevalece la opresión, la crueldad, y el hecho de adueñarse del otro, del tiempo de otro. De que nuestro tiempo de trabajo y de vida no vale. El sistema hace que una mujer sea asesinada cada 21 horas, en manos del machismo. Paramos contra eso. Este sistema no da para más. Es necesario que se vea qué pasa si nosotras paramos”, explica
“No tenemos la pretensión de que sea enorme porque es la primera vez, pero que sí haya una adhesión. Propondremos que las mujeres que no puedan parar, se reúnan unos minutos y debatan sobre la violencia de género, el acoso callejero, la violencia obstétrica, la educación sexual integral, la despenalización y legalización del aborto, temas que hacen al género”, agrega Lascano..
“No vamos a atacar a otras mujeres porque no hagan paro. Sabemos que no todas podrán parar o están de acuerdo con el paro. Entendemos a las mujeres que no acuerdan con nosotras y por eso queremos preguntarles a ellas cuántas horas trabajan o cuánto les pagan por ese trabajo, cuántas horas trabajan en sus casas en las tareas domésticas, eso es valorado, no. Qué surja desde nosotras esta comprensión. No queremos imponer el paro, sino explicar la importancia del paro internacional de mujeres. Proponemos también que ese día se adhieran con la utilización del color violeta y estaremos repartiendo nosotras cintas violetas”, explicaron tras la asamblea realizada el viernes.
Tras la segunda asamblea, las mujeres presentes acordaron que el día 8 de marzo, a la hora 19, se concentrarán en la Plaza San Martín para hacer más pública y visible el reclamo ante una sociedad que continúa siendo machista.
Para la organización de este evento, el viernes 16 de febrero, las mujeres mercedinas volverán a reunirse en asamblea, en esta oportunidad en la Plaza San Luis a la hora 19. Además, crearon una fan page en facebook para que las mujeres interesadas en sumarse o contactarse puedan hacerlo. El sitio es “Asamblea de Mujeres Mercedinas”.
Por Clarisa Altieri
