Por Ing. José Vitetta* – Una de las razones que justifican el aumento de los peajes para circular por las autopistas que nos conducen hacia la capital consiste en hacernos desistir de la utilización del automóvil para tal fin.
Desde el punto de vista económico, la motivación está justificada, tanto para el usuario como para las cuentas del país.
Para el usuario es indudable, ya que el costo de los peajes, sumado el gasto de un automotor mediano ($/km), hoy ronda los $1600.- que se oblan para recorrer 200km., ir y regresar a CABA.
Considerando las arcas del país, es mucho más económico utilizar transporte masivo de pasajeros que permitir que ellos utilicen sus medios de movilidad propios. Pensemos solamente el ahorro de combustible que produciríamos.
Pero la ecuación no cierra. El motivo es simple, para lograr el objetivo, la no utilización del automóvil, el estado debe proveer al usuario un transporte que lo reemplace y pensamos que el más idóneo, el que une a los pueblos, el que requiere menor inversión, el que genera fuente de trabajo, es el ferrocarril.
Por consiguiente, para brindar condiciones mínimas de atención al transportado: cantidad de servicios, regularidad, velocidad, etc., se debe invertir en infraestructura, material rodante, personal y organización que permitan revertir el desacierto del pasado.
No vemos que lo mencionado más arriba se esté cumpliendo o se haya programado, al menos no se ha publicitado y no vemos los trabajos necesarios licitados por la Agencia de Infraestructura Ferroviaria (ADIF).
Concluyendo, los viajes en automotor se hacen más onerosos, (aumentos en peajes, combustibles), y se ha cometido una omisión en nuestro corredor oeste, al no haber preparado previamente, como debiera haber sido en defensa del ciudadano, el medio de transporte público que permita una alternativa valedera al automóvil.
Volver atrás es complejo, las medidas están emitidas y difundidas, pero sí podemos solicitar a las autoridades, prerrogativa constitucional del ciudadano, que arbitre los medios necesarios para regularizar los servicios históricos directos, de la línea oeste del FFCC Sarmiento con destino a la estación Once.
Por lo antedicho exhortamos a las autoridades municipales, de nuestra ciudad y del corredor oeste, a trabajar en conjunto, considerar el tema como política de fondo zonal, uniendo las instituciones civiles afines, actuando con firmeza y perseverancia en pos del objetivo.
*Ing. Jose Vitetta (Mat.CPI 14824)
