El jefe comunal, el Dr. Juan Ignacio Ustarroz, junto a José Pisano, vicepresidente del Consejo Escolar, visitaron el Centro Educativo Comunitario N°801 de Mercedes. En la misma, el primer mandatario entregó un subsidio por 30 mil pesos que se utilizará para la compra de una cocina industrial. “Para nosotros vale mucho el esfuerzo del sector docente -que no la tienen fácil- y que sin embargo todos los días ponen lo mejor de sí para crear las condiciones necesarias para que nuestros niños se formen y aspiren a generar una sociedad mejor” enfatizó, el Dr. Ustarroz.
Al mismo tiempo, el primer mandatario, sostuvo “nos gusta acompañar a las entidades educativas y poner en valor el trabajo que ellas hacen, porque es muy importante” y destacó “abren las puertas del conocimiento de los niños de nuestra ciudad”.
Además, remarcó “el compromiso, la vocación y formación, que vemos en cada institución que nos toca visitar, que siempre están al servicio de la educación”
“Lo más importante para una ciudad y un país siempre es la educación. Cuando vemos los problemas que tenemos como Municipio y como sociedad -tránsito, medio ambiente, producción y empleo, etc- transversalmente lo atraviesa la educación. Por este motivo, que mejor que estar acompañando a las instituciones educativas de nuestra ciudad” mantuvo, el jefe comunal.
Asimismo, agregó “para nosotros es realmente significativo acompañar a estas docentes que son el ejemplo en la construcción de la sociedad que todos queremos”.
La directora del Centro Educativo Comunitario N°801 de Mercedes, Claudia Torelli, formuló “realmente estamos muy agradecidos, de parte del equipo de conducción y la comunidad educativa, porque siempre obtenemos una respuesta positiva del Municipio” y sostuvo “muchas gracias de corazón”.
Estela Moreno, quien se desempeña hace 32 años como cocinera del lugar, dejó sus sensaciones ante esta oportunidad de adquirir una cocina nueva, “la verdad que nos viene bárbaro, no nos funcionaba el horno, tenemos pocas hornallas, son muchos chicos y las ollas grandes no nos alcanzan. Ahora vamos a poder hacer comidas diferentes para los chicos”.
Conjuntamente, Estela contó la realidad de los 170 chicos que concurren a la institución: “muchos están pasando por una situación difícil, la verdad que los chicos tienen hambre, frío y hay muchos chicos necesitados. Nosotros tratamos de contenerlos a través de un abrazo o un plato de comida”.