El pasado miércoles, el Frente de Unidad Docente Bonaerense se presentó ante la delegación local del Ministerio de Trabajo para presentar varias planillas que componen un informe sobre la realidad de más de treinta establecimientos educativos de la ciudad.
En el lugar se hicieron presentes Silvia Gandolfi (FEB) y Fabián Díaz (Suteba) y tras el encuentro con el delegado Jorge Retegui, señalaron: “el motivo por el que hacemos esta presentación en este ente es porque le corresponde por ley y normativa al Ministerio de Trabajo inspeccionar los lugares de trabajo. Por ello es que es una instancia que se le exige, conjuntamente con nuestro empleador que es la Dirección de Escuelas, una inspección en la cual debe constar un informe de las condiciones laborales en las que estamos los docentes” y agregaron: “No es algo nuevo, se ha hecho años anteriores también”.
Por su parte, Díaz agradeció a los delegados que llevaron a cabo el relevamiento en 48 horas. “Todas las víctimas de las últimas semanas son víctimas del deterioro y la falta de presupuesto en infraestructura, y que se ha recrudecido en este gobierno con un recorte de más de 16 mil millones de pesos que se está viendo, y que se va seguir profundizando”, señaló.
En tanto, sostuvo: “Así como el Ministerio recorre las escuelas para constatar cuántos docentes paran en una medida de fuerza, que de la misma manera constaten en qué condiciones están dando clases los docentes y recibiendo clases los alumnos. Esto que estamos haciendo es porque el Ministerio está en falta ya que no hace lo que tiene que hacer. Esta es una forma de exigirle que haga lo que des su función, y no derivarlo a otras instancias porque no es lo que le corresponde”.
En tanto, Gandolfi agregó: “durante años nos han tratado de exagerados cuando hacíamos estos planteos. Lamentablemente hoy la realidad nos está dando la razón y tuvimos que perder a dos compañeros desgraciadamente para que entiendan que hay un riesgo de vida de los chicos y los docentes”.
Informe
El viernes, los referentes gremiales locales convocaron a los medios para dar a conocer algunos detalles del informe presentado. En el encuentro, además de Gandolfi y Díaz estuvo Luis Herrera (UDOCBa). Este último resaltó respecto a lo ya expresado por los referentes gremiales: “todo lo que ha sucedido marca la línea que el gobierno de la provincia y del país en general, donde se dilata en cuestiones de forma y no van al fondo de la cuestión por lo que terminan por resolver nada”.
Sobre la base de un relevamiento a nivel provincial, se hizo un informe con una serie de ítems, entre ellos: medidas preventivas contra el dengue, potabilización del agua, electricidad, gas, redes cloacas, desinfección, condiciones general de los edificios y plan de prevención de riesgos.
Si bien el informe es parcial, ya que se llegaron a relevar solo 30 establecimientos educativos, el balance del mismo da cuenta de que: en lo que respecta al agua potable (donde se evaluó limpieza de tanques y análisis correspondientes) el resultado fue que en casi el 50% de las escuelas no lo tienen.
En electricidad (tomando si hubo comprobación preventiva de instalaciones, reparación o sustitución de artefactos defectuosos, el estado de las instalaciones y el estado de artefactos en general) el resultado fue que el 60% es deficitario.
En cuanto al gas, el 75% no ha sido controlado y/o cuentan con artefactos viejos. Y en la red cloacal hay un 80% de falta de mantenimiento.
Mientras que en la condiciones del edificio (estado de paredes y techos) el 70% de las escuelas relevadas están en estado deficitario.
Según Gandolfi, “nos hemos acostumbrado a que si hay un techo en mal estar, si los baños no tienen puerta, si las ventanas no tienen vidrio, si hay cucarachas, agua contaminada igual se puede dar clases porque con algo te arreglás. Pero el problema sigue existiendo y agravándose”.
