Por TeCleArte – En un emotivo acto, plagado de recuerdos para amigos y familiares del artista plástico y periodista José Santiago “Fifo” Roggero, se oficializó la imposición del nombre del mercedino fallecido hace más de una década a la Escuela de Arte N° 2 de Mercedes. Sus cuadros, anécdotas, música, reflexiones, y recuerdos fluyeron en la tarde del viernes pasado cuando se homenajeó a Roggero, “el pintor del pueblo”.
En el hall central de la institución educativa de nivel superior ubicada en la calle 24, se hicieron presentes aquellos que conocieron a Fifo y aquellos que no. Sus hijas, Dolores y Valentina Roggero, acompañadas de sus propios hijos y su madre Cristina Canata, fueron las principales oradoras a la hora de recordar y agradecer en nombre de la familia el homenaje realizado a ese mercedino que con sus pinceladas retrató a cientos de vecinos, más allá de que por su enfermedad poco salía de su casa, aunque muchos eran los que a ella asistían para conversar con él.
La directora de la Escuela de Arte Patricia Boffi, relató cómo surgió la posibilidad de darle un nombre a la institución educativa que funciona en la ciudad desde la década de los ’80. Recordó que fueron los propios alumnos los que propusieron el nombre de Roggero tras hacer una investigación sobre artistas locales.
“Hace poco nosotros éramos una escuela más de la provincia. Desde ahora empezamos a tener un nombre, que define nuestra identidad, lo que queremos brindarles a nuestros alumnos. Queremos una escuela que esté afianzada en nuestra ciudad. Que refleje las cosas que reflejaba Fifo en los cuadros, que pintó a su gente, el trabajo de su gente, que pintó lo que pasaba en su pueblo”, resaltó Boffi.
Una alumna leyó un texto en nombre de los estudiantes. En su discurso retomó el espíritu de Roggero de retratar la vida cotidiana de Mercedes y sus vecinos: La puerta de Tribunales, la vuelta al perro, algún que otro personaje de la época, la pasarela, la pesca en el río, billares, detalles de grabados, entre otros cuadros que pueden reconocerse. “Compartimos una frase del artista: yo no soy ningún maestro ni nada por el estilo, simplemente mis cuadros forman parte de una época de la pintura de Mercedes. Es un lugar que, creo, me he ganado”, finalizó la alumna recordando los dichos de Fifo Roggero.
Sus hijas resaltaron que el homenaje “era muy fuerte” y que impresionaba que lo haya elegido “gente que no lo conoció” y que sus nietos “que no lo conocieron” caminarán por la ciudad “y verán que una escuela lleva el nombre de su abuelo”. “Él amaba a su pueblo, el parque era uno de sus lugares favoritos, la gente. Era muy amigo de sus amigos. Hacía que todo el mundo pasara a casa y conversara con él”, dijo “Lola” Roggero, a su lado, “Vata” recordó cómo pintaba a través de los cuentos que otras personas le contaban porque no podía salir de su casa a raíz de la enfermedad que le impedía caminar.
En el acto estuvieron presentes autoridades educativas, legislativas y ejecutivas, responsables junto a las hijas y nietos de Fifo Roggero de descubrir la placa que identifica a la escuela con su nuevo nombre. También estuvieron presentes amigos de Fifo Roggero y alumnos y docentes de la Escuela de Arte.
Pasado el acto protocolar, la celebración en la escuela continuó con una performance de danza de una de las integrantes del curso de ballet contemporáneo y luego la apertura de la exposición de trabajo de los estudiantes de cerámica y escultura.