Dos “aventureros”, como ellos se denominan, iniciaron un viaje en un carro acarreado con un caballo con el objetivo de llegar a Merlo (San Luis) yendo por los caminos rurales. Se trata de Diego Doñagueda (43 años) y Pedro Valdez (48 años). Partieron en la mañana del martes con el objetivo de visitar localidades rurales de Buenos Aires, La Pampa, Córdoba y San Luis. “Vamos con los tiempos del animal, vamos a hacer un viaje tranquilo”, contaron Diego y Pedro.
Un caballo, un carro adecuado para la travesía y varios perros siguiendo el camino, así partieron en la mañana del lunes dos amigos, Diego Doñagueda y Pablo Valdez. El objetivo, emprender una aventura por los caminos rurales argentinos. El tiempo de aventura lo desconocen, pero allá fueron. Podrá llevarles un mes, dos o cinco. El ritmo del caballo y la gente que se encuentren en el camino, lo determinarán.
Hace dos años Diego hizo un trayecto similar, pero solo y con dos caballos. Conoció muchas personas de las cuales se hizo amigo y ahora intentará visitar. Su amigo Pedro se acopló y debieron reacondicionar una amansadora, algo más chico que un sulki, para poder andar los dos.
“La idea mía era volver a viajar como lo hice hace dos años, visitar la gente que conocí. Con Pedro tenemos una gran amistad y salió la idea de hacer el viaje juntos. Tuvimos que conseguir un caballo de pecho. Reformar la amansadora porque le sacamos las ruedas de madera y pusimos ruedas de vehículos”, contó y luego relató que el viaje comenzó en Mercedes para llegar por caminos de tierra a Suipacha, Rivas, continuar a Baigorrita, “esquivar la laguna”, Bermúdez, Germania (General Pintos), Banderalao, Realicó (La Pampa), Quetrequén, Rancul, entre otros pueblos para terminar una primera etapa en Cañada Verde en Córdoba.
“El recorrido dependerá como estén los caminos. La idea es que si estamos bien nosotros y el animal, y si no tenemos ningún imprevisto, queremos llegar a San Luis. Nos encantaría ir hasta el Cura Brochero, pero no sabemos. Lo iremos resolviendo en el camino. Vamos con los tiempos del animal también. A veces en las estancias nos ofrecen corrales con alfalfa y nos quedaremos los días para que el animal descanse y luego seguir. Vamos a hacer un viaje tranquilo”, agregó Diego Doñagueda.
Por otra parte, Diego agradeció a todos los que colaboraron y ayudaron para que Pedro y él viajen. “Físicamente viajamos dos, pero arriba del carro viaja mucha gente que nos ayudó, que nos hicieron gauchadas, nos prepararon las cosas del carro. Mucha gente que hizo que hoy pudiésemos salir con todo armado. Nosotros somos dos aventureros que detrás hay un equipo que también hizo el sacrificio”, expresó Diego recordando el esfuerzo de familiares y amigos para que ellos emprendiesen un viaje que inició el martes para llegar a San Luis en algunos meses.
