A cien años de la creación de la pedagogía Waldorf en Alemania, el Jardín/Escuela Sol de Invierno se une al festejo celebrando, además, su primera década en nuestra ciudad.
La pedagogía Waldorf fue creada por el filósofo austriaco Rudolf Steiner a quien, en 1919, se le encomendó la educación de los hijos de los empleados de la fábrica de cigarrillos Waldorf Astoria, en Stuttgart, Alemania. Para ello instruyó a un grupo de maestros con los que fundó la primera institución de estas características. Actualmente esta pedagogía es aplicada en cerca de 1000 institutos alrededor del mundo y, en la Argentina, se enseña desde 1940.
En Mercedes, en el año 2009 surge la iniciativa de crear una escuela Waldorf. En el año 2010 y con sólo 12 niños comienza la primer entidad educativa de pedagogía Waldorf de nuestra ciudad: el Jardín de infantes y sala maternal “Sol de Invierno”. En 2016 los niños fundadores inauguran el primer grado de la escuela primaria. El ciclo lectivo 2020 contará con más de 100 niños desde sala maternal hasta 5º año del nivel primario. Es una escuela autogestiva, administrada a través de la asociación civil sin fines de lucro “Sol de Invierno” y se encuentran, ambos niveles, reconocidos oficialmente y registrados por la dirección de educación de gestión privada (DiEGeP Nº 8505 y 8363).
Cada centro Waldorf constituye una entidad autónoma que no está administrada ni controlada por una autoridad central, lo que los une es la aplicación de la misma pedagogía, basada en tres pilares:
-El respeto a cada niño, niña y joven en su desarrollo individual
-El trabajo en equipo del claustro de maestros y profesores
-La colaboración permanente entre la escuela y la familia
Bajo la consigna de acoger al niño con respeto, educarlo con amor, dejarlo ir con libertad, la pedagogía Waldorf se propone favorecer el desarrollo íntegro del individuo y para eso se equilibra lo académico con lo artístico y lo práctico. Cuando los niños relacionan lo que aprenden con su propia experiencia, están interesados y llenos de vitalidad, y lo que aprenden se convierte en algo propio. Los niños aprenden a tejer, a cocinar, a tocar instrumentos, a trabajar una huerta, además de otros contenidos curriculares. Desde el inicio de su educación escolar asimilan idiomas y transitan los siete años de la primaria junto a la misma maestra. Se trabaja bajo diferentes ritmos: diarios, semanales, mensuales y anuales. Se busca que el niño tenga un desarrollo físico saludable, cuidando que todo lo que come en el jardín y la escuela sea sano, ofreciendo frutas y meriendas elaboradas cada día con un cereal diferente. En los colegios Waldorf los maestros evalúan a los alumnos a través del contacto cotidiano y presentan a sus padres informes periódicos sobre la evolución de sus hijos.
Esta metodología de enseñanza trabaja por períodos de siete años. En el primero, que abarca desde la concepción hasta comienzos de la primaria, se enseña por imitación. En la infancia media, que va de los 7 a los 14 años, el aprendizaje se realiza a través de la imaginación, que despierta y activa los sentimientos. La adolescencia es el período de maduración de la personalidad y la etapa en la que se termina de desarrollar la actividad intelectual.
Desde esta mirada, Sol de Invierno abre sus puertas a la comunidad e invita a acercarse a todos aquellos que quieran formar parte y/o colaborar con este impulso educativo. Para quienes aspiren a formar parte del claustro docente, además del título oficial, es requisito contar con la formación en pedagogía Waldorf, que actualmente se está dictando en nuestra ciudad. Para las familias que busquen una alternativa al sistema tradicional para la educación de sus hijos, se encuentran abiertas las inscripciones para 2020.
