Por AMMDyF – Sin duda para Asamblea de Mujeres Mercedinas Diversa y Feminista, la finalización de este año 2020 con la conquista de un nuevo derecho para las mujeres, es de alegría. Ante todo, queremos agradecer a quienes se sumaron desde sus lugares a esta lucha para terminar con la clandestinidad. Porque esta era la cuestión: No, “aborto, sí o aborto, no”; sino, “legal o clandestino”.
Después de pasar un año de pandemia donde se acompañó a muchas mujeres que tuvieron que pasar la cuarentena junto a su agresor, y donde, aún, algunos resortes de las instituciones en materia de prevención de la violencia de género no funcionan, que se diera este gran paso en materia de derechos, es fundamental y una gran bocanada de aire fresco.
Desde la Asamblea, durante sus únicos años (casi tres) desde que surgió, venimos militando a nivel local para que sea ley la interrupción voluntaria del embarazo junto a partidos políticos, sindicatos y otros movimientos sociales. Luego de la sanción se abre un horizonte con nuevos desafíos y que es la efectiva implementación de la Ley 27.610. Esto es algo que se habla desde la Campaña Nacional y desde el mismo Ministerio de Salud de la Nación, y que ahora, el rol de los movimientos sociales feministas va a tener que ir en dos direcciones: por un lado, difundir el derecho que otorga esta ley y por el otro, estar alertas para que se cumpla.
A veces, pensamos que todas las mujeres conocen sus derechos y podría no serlo, siempre. Parte de la ciudadanía debilitada es no saber con qué derecho cuenta y por lo mismo, no saber cuáles son las herramientas para exigirlo y que se respete.
Desde nuestro movimiento consideramos que las mujeres y cuerpos gestantes que vayan a la maternidad del hospital local y soliciten una interrupción voluntaria del embarazo sepan que si no encuentran un equipo de salud dispuesto a respetar su autonomía y a garantizarles el acceso a la prestación médica lícita, tendrán que buscar asesoría legal que les acompañe o, podrán contar con nuestra organización al encontrarse con obstáculos. Porque si bien tenemos la ley, ahora, se viene la etapa de defenderla y que se aplique en todo el territorio argentino y eso incluye a Mercedes, por supuesto.