En el jardín N° 909 de calle 16, 103 y 105, en el barrio Obrero, se realizan obras en el edificio con el fin de facilitar el acceso a personas con movilidad reducida ampliando las veredas e instalando rampas, así como una plaza inclusiva.
De acuerdo a los transmitido por el titular del Consejo Escolar José Luis Pisano, el jardín de infantes acrecienta su matrícula «año a año» y por lo tanto, era necesario adaptar la infraestructura escolar para las personas con discapacidad motora. “Contendrá juegos nuevos para que los chicos puedan disfrutar del espacio del jardín y se reformuló todo el sistema de acceso del jardín, desde las veredas hasta la colocación de una rampa”, explicó Pisano.
Su directora, Gabriela Fau, contó que se habían encontradon con que «los niños con discapacidad motora no tenían un espacio para jugar y es que de ahí surgió el proyecto, y verlo realizado es una satisfacción muy grande para toda la comunidad del jardín”.
Recorrieron las obras el intendente municipal Juan Ignacio Ustarroz, los consejeros escolares José Pisano y Ricardo Palacios, la directora Gabriela Fau, y la arquitecta Roxana Urbina, quien está al frente de la intervención.
