Por Instituto Juan Manuel de Rosas de Mercedes – El pasado sábado 20 de noviembre se cumplió el 176° aniversario de la Batalla de la Vuelta de Obligado, Día de la Soberanía Nacional. En nuestra ciudad, integrantes del Instituto Juan Manuel de Rosas, se hicieron presentes en el monumento al prócer en la intersección de avenidas 1 y 40, para rendir el debido reconocimiento frente a las palmas allí colocadas por el Municipio temprano en la mañana.
Inmediatamente después una delegación del Instituto (de la cual formaban parte, su presidente Juan Manuel Bories Maxwell, acompañado de Mónica Brown, Ignacio Gallo, entre otros integrantes y familiares) viajaron a la vecina localidad de San Andrés de Giles para asistir al acto oficial de declaración como Monumento Histórico Nacional a la estancia “La Merced”, históricamente conocida como “Posta de Figueroa”, invitados como institución rosista por el coordinador de Patrimonio Cultural de la municipalidad gilense, Ceferino Gallo.
En septiembre de este año, la Posta de Figueroa, que ya era patrimonio municipal y provincial, finalmente fue declarada Monumento Histórico Nacional por diversos motivos. De las palabras expresadas por el arquitecto Carlos Moreno, se desprende la estrecha relación del lugar con la historia local, provincial y argentina: en principio, el predio ha estado siempre en manos de la familia Figueroa, jamás cambió de dueño; en el acto se hallaban presente el propietario, Julio Figueroa Castex, con su esposa Amelia, hijos e hijas. En segundo lugar la edificación se conserva tal cual era hace 200 años, no ha sido desvirtuada en su arquitectura típica de las haciendas bonaerenses de aquellos años, muy diferente a los grandes palacios construidos décadas más tarde, durante la segunda mitad del siglo XIX. Finalmente, el lugar se halla lindero al camino real español que unía Buenos Aires con Córdoba y proseguía hasta el alto Perú, hoy Bolivia. Toda la ruta se hallaba jalonada por “postas”, vale decir, un lugar, en general dentro del terreno de una estancia o hacienda, consistente en una construcción en la cual el viajero podía, descansar, refrescarse, cambiar caballos, comer algo y pasar la noche. La que nos ocupa, localizada concretamente dentro de la localidad gilense de Azcuénaga, estuvo a cargo de la familia Figueroa desde 1755 cuando el sargento mayor de milicias Tomás de Figueroa compra esas tierras a María Teodora Giles. Es en la que se encuentran Juan Manuel de Rosas y Facundo Quiroga, en diciembre de 1834, ultimando detalles para el viaje que Quiroga comenzaba hacia el norte y al regreso del cual encontrará su trágica muerte en Barranca Yaco, Córdoba, en febrero de 1835. Desde esta posta Rosas escribe una carta al riojano el 20 de diciembre, que testimonia su pensamiento político y analiza la situación compleja que atravesaba nuestro país en aquellos momentos. También será en la posta de Figueroa, por donde pase José María Paz, prisionero de los federales, en camino hacia la cárcel de Luján, en septiembre del mismo año.
Es por ello, que el Día de la Soberanía nacional, en la hermosa y calurosa mañana del día 20, tuvo lugar el acto oficial de declaración como Monumento Histórico Nacional a la posta de Figueroa. Con la presencia de las banderas de ceremonia de la Escuela Secundaria N° 7 Extensión 2070 (abanderada de Bandera la Nacional Brenda Taramasco y de la Bandera Bonaerense Gabriel Pereyra), la ceremonia estuvo encabezada por el intendente municipal de San Andrés de Giles, Carlos Puglelli, la secretaria de Patrimonio Cultural de la Nación Lic. Valeria González, el Director Provincial de Patrimonio Cultural arq. Pedro Delheye, el secretario de gobierno municipal Miguel Gesualdi, el delegado Municipal de la localidad de Azcuénaga Facundo Busca, la Comisión Municipal de Patrimonio, concejales y otros funcionarios gilenses, además de Juan Manuel Bories Maxwell como presidente del Instituto Juan Manuel de Rosas de la ciudad de Mercedes, rodeados de numeroso público presente interesado en la temática y en la preservación patrimonial de nuestro pasado histórico.
El acto, consistió en el descubrimiento de las placas alusivas y discursos correspondientes. La nota emotiva la dieron los Veteranos de Guerra de Malvinas, quienes representados por Emilio Samyn Ducó hicieron entrega al Sr. Julio Figueroa, de copia de una bandera de la Confederación Argentina, la cual fue izada inmediatamente en el mástil de la posta. Por su lado, el Tercio de Cantabros Montañeses de Buenos Aires, vestidos con las ropas típicas de los “Colorados del Monte”, le dieron la nota colorida al acto, realizando una salva de honor en homenaje a esta declaración.