En el mes de abril, S.O.S. Hábitat llevó adelante la caminata bajo la luz de la luna llena del mes. El recorrido del grupo convocado comenzó en la avenida Dorrego, cerca del puente que cruza el Río Luján en la Pulpería de Cacho. A medida que caminaban bajo la luz de la «luna rosa», tal como se la llamó a la luna llena de abril, la cuarta del año, se fue explicando los motivos por los cuáles el satélite natural se veía como se veía.
«Su nombre tiene que ver con la tradición de los indios americanos que asociaban la llegada de esta fase lunar a la aparición de un musgo de color rosado, el phlox subulata, que es muy común en Estados Unidos y en Canadá. Según explicaron desde Meteored, en esta ocasión la luna se vio mucho más luminosa que en otras oportunidades debido a que el área iluminada por el sol será mucho más grande. Así, mientras la Luna Rosa 2022 se podría apreciar durante tres días, el 100 % de su iluminación lo alcanzó, puntualmente, el sábado 16, a las 20:55 horas», explicaron la Asociación Cívil.
Otra temática durante el recorrido fue la paleontología. «Recordamos las explicaciones de Jorge Petrocelli y Javier Moleres sobre el tema, fuimos contando que si navegamos el Río Luján hasta casi sus nacientes, nos encontraremos con un “tesoro paleontológico”, repleto de conocimientos y nueva información sobre el pasado de nuestra tierra. El río nos muestra con toda claridad a lo largo de sus márgenes, las diferentes capas superpuestas sedimentarias -de miles de años de antigüedad- sobre las que se asienta el suelo que hoy pisamos», explican.
«Observando con detenimiento, se pueden descubrir en los estratos más antiguos, los restos de mamíferos gigantes, integrantes de la fauna existente durante el Cuaternario sudamericano, y que desaparecieron definitivamente hace más de 8500 años. Localizar esos restos, tomar nota de su posición, fotografiarlos y dar rápido aviso al Museo de Ciencias Naturales «Carlos Ameghino» para que proceda a su recuperación… Es la mejor forma de salvaguardarlos, para que puedan luego ser estudiados -extrayendo los valiosos datos que guardan sobre el pasado- y exhibidos en un lugar adecuado», agregan.
«Esa es la manera de proteger nuestro “tesoro Paleontológico” para las futuras generaciones. Hoy ese cúmulo de importante información se ve nuevamente amenazado, por los anuncios de la posible realización de un gran trabajo de dragado, el cual tendrá escasas probabilidades de evitar las inundaciones, pero seguro destruirá las barrancas del río, removerá las capas sedimentarias, y hará polvo los restos fósiles, perdiéndose todo el conocimiento que ellos atesoran. Este es uno de los motivos por el cual SOS Hábitat, hoy le dice No al dragado», agregaron.
«Continuamos el recorrido hasta el canal de la 15, donde se observó un gran caudal de líquidos sin tratar mezclados con residuos sólidos. Recordamos que este canal debe llevar líquidos pluviales pero no fue lo notado en ese momento. Lamentablemente, esos efluentes contaminados desembocaban en el río Luján», destacan desde SOS Hábitat.
«Camino al parque nuevo, hablamos de las plantas nativas. Recordamos que las especies nativas (autóctonas o indígenas): son aquellas que crecen en el área biogeográfica de donde son originarias. Cuando hablamos de plantas nativas, no nos referimos a una nación, sino a la región natural. Así muchas especies que pertenecen a la flora de Buenos Aires, también pertenecen a la flora de otras provincias (Entre Ríos, La Pampa, etc.) o incluso a floras de otros países (Uruguay, sur de Brasil, etc.). Las nativas son aquellas que durante miles de años fueron adaptándose a las condiciones químicas (salobridad, acidez, alcalinidad) del suelo de una determinada región geográfica, como así también a las condiciones físicas (temperatura, vientos, regímenes de lluvia) de la misma región, considerándose así como indígenas las plantas propias de las zonas de origen, independientemente de límites políticos de provincias y países»
«Algunas ventajas para el ecosistema. son: Permiten ahorrar agua en el riego, están mejor adaptadas al clima y suelo local, Un ambiente silvestre similar al originario, permite que el sistema se autorregule y no existan plagas, Plantas polinizadas por aves o insectos, otras por animales y el viento. Una de las razones que nos lleva a proponer el uso de plantas nativas es que principalmente estas especies interactúan con el medio y las demás especies (de flora y también de fauna). Así encontramos plantas que son polinizadas por aves o insectos, otras que son distribuidas por animales y el viento, u otras que crecen trepando sobre árboles nativos, por citar algunos casos. Otro punto es que algunas de estas plantas, se hallan exclusivamente en nuestra región, por lo cual si desaparecen aquí, lo harán para todo el mundo, no ocurriendo lo mismo con las plantas exóticas cultivadas».
«Por ejemplo en la Provincia de Buenos Aires hay casi 2000 especies nativas, número que nos brinda una noción de la riqueza potencial de la flora silvestre para la jardinería en este territorio. No debe confundirse el concepto de nativo con el de nacional, ya que algunas especies de una zona fitogeográfica pueden funcionar como exóticas en otras zonas. En la medida que volvamos a tener más espacios verdes con plantas originarias de cada región, tendremos un ambiente más amigable para las aves silvestres cerca de nuestros hogares. El uso masivo de plantas exóticas, ha generado una simplificación notable de la biodiversidad tanto en los sitios parquizados como en las áreas naturales invadidos por los vegetales foráneos que tienden a desplazar a las del lugar».
«Problemas con las Plantas Exóticas. Son aquellas que crecen fuera de su sitio de distribución original gracias al cultivo o introducción humana involuntaria. Si bien muchas plantas exóticas cultivadas atraen fauna silvestre, es importante observar que estos vínculos se hallan fuera del equilibrio original y se reproducen sin límites convirtiéndose en “invasoras” o plagas. Es el caso de los “ligustros”, “ligustrinas”, “paraísos”, “moreras”, “acacias” y otras, cuyos frutos alimentan a varias aves que comen frutos, las que “a cambio del alimento”, dispersan las semillas al salir intactas de su aparato digestivo. Este hecho se halla en pleno avance y puede verificarse con la proliferación de bosquecillos puros de estas plantas en las áreas naturales y terrenos vacantes del área metropolitana. Las plantas exóticas no tienen gran interacción con la fauna local, pocas aves e insectos las visitan porque no se alimentan de ellas.Muchas de las especies exóticas contienen peligrosos venenos que son unas de las causas de la perdida de lo nativo (Ej.: acacio negro) Las plantas exóticas no tienen los controladores naturales de sus zonas de origen (como parásitos y depredadores) pueden transformarse en una plaga y amenazar a la flora local».
«Finalizamos la caminata con canciones de Cristian Melgar a quien agradecemos siempre su predisposición en nuestras actividades. Muchas gracias a todos los que se acercaron en esta actividad. De a poco, vamos logrando modificar rutinas y conductas que alteran nuestro entorno. Siempre pensando en las generacions futuras y qué ambiente les legamos».