Por Santiago Casado – La obra debería haber terminado hace más de 10 meses, pero hubo conflicto con la constructora y a comienzos de este año el ejecutivo local le rescindió el contrato. Desde entonces, el Municipio se hizo cargo de los trabajos, que tienen un grado de avance del 70% y terminarán en diciembre, según estiman desde Obras Públicas. Mientras tanto, la fecha de reapertura sigue siendo una incógnita.
En febrero del año pasado el gobierno de Mercedes licitó el proyecto de reforma y puesta en valor del Museo Municipal de Ciencias Naturales Carlos Ameghino, una obra financiada por el Ministerio de Cultura de la Nación con un presupuesto fijo de 31 millones de pesos. Tres meses después, la contratista Delta Construcciones inició las obras, que durarían 150 días corridos, pero el avance no se dio como estaba planificado.
En diálogo con HoyMercedes, el secretario de Obras Públicas de la Municipalidad, arquitecto Emanuel Pérez Carrera, explicó a que “como la empresa no avanzaba al ritmo esperado y había temas sobre la construcción en los que no estábamos de acuerdo, emitimos hasta 20 órdenes de servicio con esas objeciones y dimos prórrogas” hasta que finalmente a inicios de 2023 y con aproximadamente un 35% de la obra ejecutada “hicimos la rescisión, porque la empresa no estaba funcionando”.
Antes de esa decisión, hubo “un período grande de tiempo en el que la empresa dejó de ir a la obra mientras nosotros la intimábamos a que la retome”, produciéndose así un bache en el que la obra estuvo parada “porque con el contrato vigente y sin rescisión nosotros no podíamos ingresar”, detalló el secretario.
Tras la intervención del área de Legales del Municipio y la rescisión del contrato, Pérez Carrera comentó que a comienzos de este año el ejecutivo local retomó la obra y adelantó que “la fecha estimada de finalización es diciembre de 2023”. Desde la secretaría informaron que la obra cuenta actualmente con “entre 4 y 5 personas de promedio trabajando, con días en los que puede haber más gente y otros en los que no hay nadie”, principalmente por procesos de compras que a veces traban la provisión de materiales.
Pero que el final de la obra esté planificado para diciembre no significa que el museo vaya a reabrir en esa fecha. “Igual que si fuese una casa, lo que se licitó incluye el piso, paredes pintadas, puertas, ventanas y baños completos, pero todo lo que es mobiliario, montaje y disposición de vitrinas y front desk para la nueva recepción no está incluido y lo hace el área responsable, que en este caso es Cultura, adaptando lo que ya había en el museo o bien mediante nuevas licitaciones de esos bienes”, explicó el responsable de Obras Públicas.
HoyMercedes se comunicó con la secretaria de Cultura del municipio, Jimena Rivas, quien informó que si bien se está planificando la forma en la que funcionará el museo aún no existe una fecha planificada de reapertura. Desde la secretaría tampoco dieron precisiones sobre eventuales procesos de compra de mobiliario, vitrinas o front desk, dato que hace pensar que salvo que aprovechen lo que ya tenía el museo o exista una inauguración parcial, la fecha de reapertura quedará para más adelante.
El proyecto en curso contempla una reforma integral del museo, con el objetivo de incrementar el número de visitas, ampliar su llegada a la ciudadanía e incrementar su utilidad para la comunidad científica, docentes e investigadores, manteniendo su carácter público y gratuito.
Desde el punto de vista edilicio, el museo contará con una nueva recepción que ocupará el antiguo jardín al frente, manteniendo las salas de arqueología, biodiversidad y paleontología, y añadiendo nuevas salas de exposiciones, de ciencias interactiva, un laboratorio de experiencias para alumnos y una tienda para venta de merchandising y publicaciones. Del otro lado del mostrador, se renovará el laboratorio de uso interno del museo y su biblioteca.
Presupuesto fijo en un contexto inflacionario.
La licitación 66/2021 que dio origen a este proyecto establecía en su artículo 46 que el municipio de Mercedes “NO reconocerá para el presente contrato la redeterminación de los precios ofertados”, es decir, que el presupuesto de 31 millones de pesos era fijo y como detalla el secretario de Obras Públicas “el contratista tenía que mantener el mismo precio durante el plazo de la obra”.
Los atrasos en la ejecución en un contexto de inflación creciente hicieron que finalmente los 31 millones de presupuesto quedasen cortos y la constructora perdiese interés en el proyecto. Sin embargo, parte del problema también lo heredó el Municipio, porque según explicó Pérez Carrera “la decisión del ejecutivo local es terminar la obra con lo que envió Cultura más un poco más”, quizás superando los 35 millones de pesos totales pero no mucho más, según precisó.
Como el ajuste es muy chico comparado con la inflación del período, el secretario indicó que la idea es que en diciembre “la obra se pueda usar pero seguramente va a tener algún aspecto a terminar más adelante, porque hay mucho desfase en el monto y va a ser muy difícil completar todo lo que se tenía en mente en el proyecto”.
Administrativamente, la obra “está avanzando de forma atomizada por rubro, a través de pequeñas contrataciones de materiales y mano de obra que se manejan de forma directa con el área de Compras y sin licitación porque se trata de montos bajos”. Pérez Carrera explicó que esta forma de contratación reduce los costos, pero no llega cubrir el desfase que hay en el presupuesto.
Finalmente y según aseguraron desde el ejecutivo local, la obra está recibiendo auditorías diariamente y en estos días se están haciendo algunos revoques, pintura, colocación de pisos en ciertos sectores y terminaciones generales.
