En sesión extraordinaria del Concejo Deliberante se aprobó un incremento para la tarifa de taxis y remises en la ciudad. El tema trajo posturas encontradas entre los ediles como también entre los propios representantes de las paradas.
El pasado jueves se llevó a cabo una sesión extraordinaria en el Honorable Concejo Deliberante en la cual se dio tratamiento a algunos temas de importancia para la ciudad.
Ante la compleja situación económica que le toca atravesar al país, los conductores de taxis y remises de la ciudad se reunieron previamente con los concejales para solicitar un incremento de tarifas, dado que dicha disposición es facultad del legislativo local.
En ese contexto y tras haber dialogado con los representantes de la activad en Mercedes, los ediles aprobaron el nuevo incremento el cual quedó estipulado en 1.200 pesos para la bajada de bandera y un costo de 60 pesos para la ficha por 100 metros o 30 segundos por reloj tarifario.
Esta suba representa casi el doble de lo que se venía cobrando hasta el momento, lo cual despertó algunas contradicciones y disputas entre las diversas paradas de taxis y remises de la ciudad.
Posturas y unanimidad
Si bien la ordenanza para determinar el incremento de las tarifas para taxis y remises fue aprobada por la unanimidad de los bloques del HCD, lo cierto es que la temática despertó algunas controversias en el cuerpo.
En principio, Fernando Masson (FdT) tomó la palabra y comenzó agradeciendo a los bloques por el acompañamiento dado que “permitieron que cumpliéramos con la palabra que le habíamos dado al sector de los taxistas el año pasado que -en caso de que la inflación se acelerare y hubiera un contexto nuevamente complejo para poder sostener el servicio- íbamos a volver a juntarnos y tratar los pedidos de aumento”
En la misma línea y ejemplificando el trabajo llevado adelante desde el HCD también agradeció “al de los taxistas que la mayoría estuvo de acuerdo con este aumento al que hemos llegado” destacando que si bien “algunos no” se terminó por aceptar la opinión de la mayoría.
Con respecto a la medida, el concejal puso el foco en que “por supuesto que no es simpático dar un aumento pero tuvimos en cuenta que hay que sostener este servicio público. Los taxistas dieron sus fundamentaciones en el aumento de combustible, de los repuestos y también el hecho de tener en cuenta que tienen que sostener a sus trabajadores”.
Por su parte, la concejal Silvia Di Leo, representante del bloque de La Libertad Avanza también se manifestó de manera pública en el recinto antes de entrar en la votación del expediente y sostuvo que “nosotros obviamente vamos a acompañar el aumento, no porque sea nuestra idea fijar tarifas sino que quiero dejar sentado que es una necesidad. Pero nuestra postura (la de la LLA) es que los taxistas sean ellos quienes regulen sus propias tarifas. Yo no conozco el mercado del taxi, no conozco los costos, no conozco absolutamente nada y creo que es algo que lo tienen que arreglar la oferta y la demanda. La ley (Ley Orgánica de la Municipalidades) nos obliga a fijar las tarifas por eso lo hacemos, no porque sea nuestra convicción”.
No obstante, la edil reconoció que “era imposible manejarse con las tarifas que había hasta ahora” y dejó en claro la propuesta que acercó al cuerpo. “La idea fue establecer una franja en la cual ellos puedan moverse, pero nos dijeron que era imposible hacerlo por la Ley Orgánica y por la reglamentación del HCD. Pero yo creo que no es una manera que 18 personas podamos determinar cuál es el costo de la tarifa de un servicio como el taxi en este momento, sobre todo cuando hay un montón de paradas y cuando perfectamente podrían competir. Me parece que es bastante absurdo porque ahora nos vamos a tener que reunir en uno, dos o tres meses”.
Pese a que el proyecto trajo a colación algunas posturas encontradas de parte de los bloques, el aumento fue aprobado por unanimidad.
Diferencias entre los taxistas
Por otra parte, antes de llegar a la votación en el HCD los diferentes choferes de taxis y remises de la ciudad también salieron a manifestar sus diversas posturas en torno al incremento de la tarifa.
En medio de las negociaciones con el Concejo, una de las que hizo pública su opinión fue Andrea Vara, delegada local de la Federación de Conductores de Taxis de la República Argentina.
En dialogo con diversos medio de la ciudad manifestó que el aumento que finalmente se terminó aprobando “atenta contra el bolsillo del usuario, prestando un servicio que deja mucho que desear”.
En ese sentido, Vara apuntó a la complejidad de conseguir un auto disponible en la madrugada, sumado a la situación económica por la que atraviesa la Argentina.
“El incremento del salario no se equipara con los precios que tenemos, va a haber gente que no va a poder subirse al taxi. Entonces para mí la ecuación es muy simple, ha sido un error plantear la bajada de bandera a los 100 metros” sostuvo Vara, dejando claro que hubiese sido mejor mantener la tarifa plana a 1.200 pesos y que la ficha de 60 pesos empiece a correr después de los 1.000 metros.
Ante las palabras de Andrea Vara en los medios de la ciudad, los representantes de las paradas 404, Taxi Mitre, Mi Taxi, Radio Taxi y Taxi Unión emitieron un comunicado al respecto, defendiendo el acuerdo al que se llegó con los concejales.
Mediante un comunicado de prensa los taxistas expresaron que “ante las manifestaciones periodísticas de la señora Andrea Vara en referencia al aumento de tarifas de taxis en Mercedes, la mayoría de los titulares de licencias de taxis manifestamos que no coincidimos ni apoyamos las mismas, las cuales reflejan un evidente desconocimiento de la realidad de nuestra actividad y más parecen manifestaciones políticas que profesionales”
En la misma línea y desconociendo la representatividad de Vara agregaron que “en Mercedes no existe sindicato alguno de choferes, no hemos elegido delegado y no reconocemos a la señora Vara como referente de nuestra actividad”.
Volviendo a la cuestión tarifaria, los taxistas pusieron el punto en que “desde hace varios años los incrementos de tarifa han ido perdiendo ante la inflación ya que el Índice de Precios de Consumo (IPC) no refleja los incrementos de costo de la actividad que han sido superiores. En el año 2022 el IPC anual fue de 95% mientras que la tarifa se incrementó en un 75% es decir un 20% por detrás de la inflación. En el año 2023 el IPC fue del 211% y el incremento de tarifa en el mismo periodo fue del 116%, un 95% menor”, agregando que “es evidente que el servicio ha perdido rentabilidad lo que va en detrimento de la calidad del mismo”.
Con respecto al acuerdo que llegaron con los concejales y que fue criticado por Andrea Vara, los taxistas manifestaron que “la tarifa acordada este mes no recompone, ni mucho menos, los valores de hace dos años pero nos va a permitir sostener la actividad temporalmente y por poco tiempo en estos momentos de gran incertidumbre”.
“La misma está acorde, pesos más o pesos menos, con la mayoría de las localidades algunas de ellas que a similar tarifa tienen combustible a un 12% más barato (CABA) 24% (Neuquén, Viedma, Cipolletti).
Por último y defendiendo la fuente laboral, los representantes de las paradas mencionadas pusieron el foco en el aumento del combustible el cual “se incrementó más de un 160% siendo el insumo directo más importante”
“No queremos delegados, no queremos sindicatos y no queremos subsidios. Solo queremos tarifas acordes a nuestros costos que nos permitan sostener la actividad y a nuestras familias. Y no, no queremos atacar a nuestros usuarios, la mayoría de los cuales son conscientes de nuestra situación” concluyeron.
Colaboración Mariano Oyarzú