En un operativo de gran envergadura a nivel provincial, la justicia bonaerense llevó a cabo un allanamiento en un domicilio de Luján, en el marco de una investigación por pornografía infantil. Este procedimiento se enmarcó en la «Operación Protección de las Infancias IV», una iniciativa que busca erradicar este delito de las redes. También actuó la justicia mercedina.
El allanamiento en cuestión se realizó en una vivienda ubicada en avenida Constitución al 2100. Allí, efectivos policiales secuestraron dispositivos electrónicos como computadoras y teléfonos celulares, los cuales serán peritados para determinar si contienen material de abuso sexual infantil.
Un trabajo articulado
Esta megaoperativa, que incluyó 114 allanamientos simultáneos en diferentes puntos de la provincia, fue coordinada por el Departamento de Delitos Conexos a la Trata de Personas, Pornografía Infantil y Grooming del Ministerio Público bonaerense. La investigación, que se extendió por más de dos meses, se basó en la búsqueda proactiva de material en internet, denuncias de particulares y colaboración de organizaciones internacionales.
Cifras alarmantes
Los resultados del operativo son preocupantes. Se detuvo a 21 personas y se secuestraron cientos de dispositivos electrónicos, además de drogas. La investigación reveló una red de sospechosos que incluía a personas que trabajaban en contacto directo con niños, niñas y adolescentes.
El caso de Luján
En el caso específico de Luján, la Fiscalía 1 de Delitos Complejos de Mercedes se encuentra a cargo de la investigación. Si bien aún no se han confirmado detenciones en este domicilio, las evidencias secuestradas son claves para avanzar en la causa.
Un mensaje contundente
Las autoridades destacaron la importancia de este tipo de operativos para combatir un delito que deja profundas secuelas en las víctimas. La articulación entre distintas fuerzas de seguridad y organizaciones internacionales fue fundamental para desarticular esta red criminal.
Operativo
Este operativo representa un duro golpe a quienes se lucran con la explotación sexual infantil. Sin embargo, la lucha continúa. La prevención y la concientización son fundamentales para proteger a los más vulnerables.