Por Jorge Lasala – Este domingo se confirmó que 1.97 g/l de alcohol en sangre fue lo que registro el test realizado por las autoridades al chófer misionero causante del siniestro vial en el kilómetro 113 de la ruta 5, el pasado viernes 21 de febrero.
Néstor Etelvino Schulz, de 43 años , quien viajaba acompañado por su pareja y dos pequeños niños, conduciía el camión Iveco 440 con semiremolque que generará el siniestro vial con otro camión y un automóvil que circulaban en sentido contrario, fue quien tras el test realizado por autoridades intervinientes resultará positivo al consumo de alcohol.
El día del evento al llegar al lugar los medios de emergencia se encontraron con una acalorada discusión que mantenían algunos conductores con el mencionado chófer , quien según referían tenía aliento etílico y venía realizando malas maniobras en la conducción antes de la colisión, refirieron también que el mismo habría reconocido que había cenado en una parrilla y consumido alcohol junto a su pareja.
Más allá de la gravedad de la situación, que por fortuna, no causó pérdidas humanas, abre una vez más el debate sobre el flagelo del consumo de alcohol al volante que genera , en este caso cuantiosos gastos a la empresa propietaria del transporte , tales como destrucción total del camión, lucro cesante , reclamo judicial por los daños provocados no cubiertos por el seguro, que ante el caso de alcoholemia positiva es probable que quede sin cobertura.
El alcohol y la falta y/o no respeto del horario de descanso son los enemigos más frecuentes de las empresas de transporte, ya que son eventos que generan cuantiosas perdidas.
Por Jorge Lasala de Suipacha
