Un impresionante vuelco de un camión de reparto de la firma «Soda y Agua Panizza» conmocionó la Autovía 5 el pasado sábado, a la altura del kilómetro 68.500, frente al barrio Luna. El incidente, que milagrosamente no dejó víctimas fatales, resultó con un joven de 22 años herido y el vehículo incrustado en el arroyo Gutiérrez.
El camión Mercedes Benz modelo 710, identificado con el número de unidad 22 y proveniente de Capital Federal, transitaba en sentido Jáuregui-Luján. Una posible falla mecánica provocó que el conductor, Damián Marains, de 28 años, perdiera el control del rodado.
Según los primeros reportes, el camión se despistó de la cinta asfáltica, desplazándose hacia la cuneta derecha antes del guardarraíl. Continuó su trayectoria descontrolada por la ladera hasta volcarse, quedando con las ruedas hacia arriba y parcialmente sumergido en el arroyo Gutiérrez.
En el siniestro resultó herido Matías Meza, de 22 años, quien viajaba como acompañante. El joven fue rápidamente asistido y trasladado en ambulancia por Bomberos Voluntarios al Hospital Zonal General “Nuestra Señora de Luján”. Allí, se le diagnosticó un corte en el labio superior y una fractura en el fémur izquierdo, siendo su estado de salud estable.
A pesar de la magnitud del accidente, la circulación vehicular en la Autovía 5 no se vio interrumpida ni restringida, lo que facilitó el trabajo de los equipos de emergencia y peritos. En el lugar del hecho, trabajaron efectivos de la Policía, personal de la concesionaria vial y peritos de la Policía Científica, quienes realizaron las tareas de rigor para determinar las causas exactas del vuelco.
Un detalle no menor es que el arroyo Gutiérrez, si bien de escasa profundidad y con abundante maleza, actuó como una suerte de amortiguador en la caída del camión, evitando consecuencias que podrían haber sido mucho más graves.
La investigación del caso quedó en manos de la Fiscalía 9 de Luján, que buscará esclarecer las circunstancias precisas que llevaron a este espectacular incidente vial.
Foto: El Civismo
